Izquierda Unida pide al ex presidente que comparezca voluntariamente

Francisco Frutos, miembro de la dirección de Iquierda Unida, pidió anoche a Felipe González que comparezca voluntariamente ante el Tribunal Supremo, pese a la decisión de la Junta de Fiscales de pedir que no se llame como imputado al ex presidente del Gobierno por el secuestro de Segundo Marey, en diciembre de 1983. En opinión de Frutos, el criterio de los fiscales es, desde un punto de vista político, la "continuación de un desastre político y jurídico". El secretario de Relaciones con las Cortes, José María Michavila, tras señalar que respeta las decisiones judiciales, resaltó que el Gobierno "está empeñado en resucitar a Montesquieu y en, que haya independencia plena entre los poderes ejecutivo y judicial, por lo que", dijo, "no hay más comentario que hacer".Similar postura adoptó el PSOE. Y el propio Felipe González se limitó al manifestar que respeta la decisión de la Junta de Fiscales de Sala.Teodoro Mota, en nombre de la acusación popular, y los abogados de los policías procesados Miguel Planchuelo y Francisco Álvarez criticaron la decisión de la Junta de Fiscales. Manuel Murillo, defensor de Álvarez, dijo que el acuerdo "desacredita a toda una institúción". Para José Anibal Álvarez, abogado de Planchuelo, "la justicia no es ciega".