Anguita suscita fuerte oposición en IU al rechazar el pacto sobre pensiones

No ha gustado nada en la corriente oficial de IU. El acuerdo sobre pensiones firmado entre los sindicatos y el Gobierno no ha gustado y ha sido un factor de división en IU. Por primera vez, contra el informe oficial han votado sectores que siempre han estado pecho a tierra junto a Julio Anguita. Algunos, incluso, para evitar votar en contra o abstenerse han preferido abandonar la reunión en el momento más crucial. Pero Anguita advirtió que en todas partes "explicaremos nuestra postura".

Esa explicación, según precisó Anguita, se llevará a cabo también en Cataluña, pese a que Iniciativa no está por la labor de oponerse al pacto cerrado por los sindicatos. "Nuestra opoosición", precisó el coordinador general de la presidencia de IU, "nunca debe entenderse como descalificación a los sindicatos".Ha sido, sin duda, uno de los documentos más medidos de IU. Se ha sopesado cada palabra, cada verbo, cada adjetivo. Todo en un afán de recoger los máximos apoyos a una posición, en contra del pacto firmado entre sindicatos y Gobierno, que Anguita ya había anunciado que sería de rechazo. A pesar de ello no consiguió Susana López, responsable del área de trabajo de IU, que la presidencia federal apoyara en bloque su informe.

Que Nueva Izquierda estuviera en contra era lo esperado. Porque Nueva Izquierda también había anunciado previamente su aliento a los sindicatos. Pero ayer no fue sólo Nueva Izquierda. El Pasoc votó en contra del informe oficial.

El eurodiputado Alonso Puerta, líder del Pasoc, explicó que no se podía ir contra una decisión sindical, porque "los sindicatos tienen su propio tiempo". "Debernos darnos", dijo Puerta, "un tiempo de reflexión y tratar de mejorar el acuerdo en el proceso parlamentario".

Alonso Puerta confesó que a él no le gusta especialmente el texto suscrito entre sindicatos y Gobierno, pero que entiende que IU debe respetar la autonomía sindical y, en todo caso, intentar mejorar las condiciones en el proceso parlamentario.

Lo de Nueva Izquierda ya era sabido. Intentó sin éxito introducir una enmienda que, en definitiva, suponía reconocer sin matices el éxito sindical del acuerdo. No consiguió otros votos que los suyos pero, al menos, su propuesta sirvió para que algunos miembros de la presidencia criticaran la redacción de algunos párrafos del informe oficial altamente críticos con los sindicatos.El texto definitivo aprobado ayer elimina referencias poco gratas a la actuación de las centrales obreras. Y sobre todo, elimina unas líneas que cargaban sobre "la dirección de las centrales sindicales" la responsabilidad de determina das actuaciones.

También se han suavizado las referencias que contenía el infonne sobre "el espaldarazo al PP" que supone el acuerdo con los sindicatos. El texto definitivo es mucho más aséptico que el que Susana López había presentado en origen, aunque recoja algunas críticas que dificilmente podían ser eliminadas.

Valga como perla el lamento de que en 1985 IU participó en una huelga general "contra un Gobierno de la izquierda, precisamente por el recorte de pensiones", mientras que en un marco político, económico y social peor los sindicatos no han considerado necesaria la convocatoria de una moviliza ción semejante.

Abstenciones y ausencias

El acuerdo de los sindicatos y el Gobierno fue aprobado por 30 votos a favor, 10 en contra y 6 abstenciones. Posiblemente en este caso sean las abstenciones lo más significativo. Y las ausencias.Se abstuvieron, por ejemplo, Isabelo Herreros (Izquierda Republicana), Ángel Pérez (responsable de IU de Madrid), Julio Setién (ecosocialista), Pedro Antonio Ríos (miembro de la Mesa del Congreso de los diputados por IU), el eurodiputado Carlos Carnero y el gallego Ángel Guerreiro.

Rosa Aguilar, portavoz del grupo parlamentario IU-IC, estaba ausente en el momento de la votación. Como diría Anguita utilizando el lenguaje evangélico, el que quiera entender que entienda.