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El presidente Yeltsín exige un acuerdo con la OTAN antes de que se amplíe hacia el Este

El presidente ruso, Borís Yeltsin, declaró ayer que la OTAN debe firmar con Rusia un acuerdo antes de que se amplíe hacia el Este y acepte como miembros a países que eran aliados del Kremlin. Yeltsin hizo estas declaraciones durante su entrevista con el ministro de Defensa, ígor Rodiónov, en el Hospital de Moscú, donde el presidente sigue un tratamiento para disminuir los riesgos de la operación al corazón que se le practicará dentro de un mes y medio o dos.

"Yo veo el asunto de la siguente manera: primero un acuerdo con Rusia y después resolvéis el problema de la reconstrucción de la OTAN y de su expansión. Pero ellos lo quieren al revés. ¡Eso no puede ser!", dijo Yelsin durante una conversación con Rodiónov. La televisión mostró imágenes del encuentro en las que se vio al líder ruso de buen aspecto y muy animado.Rodiónov informó a Yeltsin de su reciente vía e a Bergen, Noruega, donde se reunió con los ministros de Defensa de los países miembros de la OTAN y criticó los planes de expansión de ésta. Por su parte, el ministro de Exteriores, Yevgueni Primakov, advirtió, también desde el extranjero, que Rusia tomará medidas de represalia si el. bloque noratlántico se ampliaba, aunque no especificó en qué consistirían.Moscú mantiene que la expansión de la OTAN amenaza a la seguridad de Rusia, especialmente cuando tanto la alianza noratlántica como los aspirantes a convertirse en nuevos miembros se han negado a prometer o garantizar que no emplazarán armas atómicas en los territorios de los países que pasen a formar parte de ella.Critica de Lébed

El general Lev Rojlin, diputado del partido gubernamental Nuestra Casa es Rusia y presidente del comité parlamentario de Defensa, opinó la semana pasada que la expansión de la OTAN y la negativa a dar garantías de que no emplazará armas atómicas en los nuevos países miembros hacen prácticamente imposible que la Duma Estatal ratifique el acuerdo de limitación de armas estratégicas START-2. En estas condiciones, dijo Rojlin en un seminario sobre problemas de la seguridad europea celebrado en Londres, ratificar el START-2 significaría "traicionar los intereses de Rusia".También el secretario del Consejo de Seguridad, Alexandr Lébed, tiene una actitud extremadamente crítica ante los planes de expansión de la OTAN y ya ha advertido que adoptará "una posición dura" durante su próxima visita a la sede de esta organización. Lébed viajará a Bruselas el domingo próximo.

Yeltsin y Rodiónov también discutieron ayer "los problemas del Ejército, en especial los que se refieren a la financiación de las Fuerzas Armadas y su reforma", se dice en la escueta nota divulgada después de la reunión.

Aunque el pretexto para recibir' a Rodiónov fue el reciente viaje 'de éste a Bergen, es muy probable que la verdadera razón por la que Yeltsin decidió entrevistarse con el titular de Defensa fueran las duras críticas expresadas por Lébed por la falta de financiación del Ejército y su advertencia de que en cualquier momento las tropas pueden sublevarse debido a sus desesperada situación económica.En varias entrevistas recientes, Lébed acusó al Gobierno de boicotear a Rodiónov con el objeto de "desorganizar completamente a las Fuerzas Armadas y hundir al Ministerio de Defensa". "Cómo explicar, si no, el hecho de que otros ministerios corno el del Interior o Seguridad sean financiados en un 60%-70%, mientras que el de Defensa recibió en julio sólo el 4% de lo que le debían y en agosto nada?", inquiere Lébed.El primer ministro, Víktor Chernomirdin, también ha reaccionado rápidamente a las críticas (le Lébed y ha recibido a Rodiórov, a quien le prometió revisar el presupuesto estatal para 1997 con el fin de poder dar más dinero al Ministerio de Defensa. Ayer, Chernomirdin firmó una instrucción para crear una "comisión gubernamental encargada (te coordinar los problemas relacionados con la financiación de las estructuras, de fuerza". La comisión la presidirá el primer vicejefe del Gobierno, VIadímir Potanin. Además, la próxima semana Chernomirdin reunirá por primera vez al Consejo de Defensa -un nuevo órgano que muchos consideran que ha sido ideado como contrapeso al poderoso Consejo de Seguridad para debatir los problemas de financiación del Ejército.Rodiónov, sin lugar a dudas, ha aprovechado la ocasión que se le presentó ayer para insistir ante el presidente de que firme los nombramientos de una serie de cargos clave del Ministerio de Defensa que están vacantes desde que él fue nombrado ministro. Muchos observadores interpretan la no financiación del Ejército y la negativa a nombrar a los candidatos de Rodiónov como el deseo de liberarse del nuevo ministro, que es un hombre de confianza de Lébed.

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