España exige al Gobierno de Bissau que envíe a sus países a los inmigrantes

EL diplomático Marcos Vega, alto funcionario del Ministerio del Interior, aterrizó ayer en Bissau para exigir que los inmigrantes expulsados por España el pasado junio sean repatriados a sus países de rigen. Tres meses despues de que llegaran a Guinea-Bissau, el Gobierno de este país no ha cumplido el trato que hizo con España. Uno e esos inmigrantes está muerto -lo mató un policía el pasado lunes-, tres heridos, ocho en fuga y 28 en la cárcel. Sólo cinco fueron repatriados a Guinea Conakry. Vega afirmó: "Todos deben volver a sus países. Es la única solución legal, justa y satisfactoria. Las autoridades han garantizado quien todos serán repatriados en unos días."

Marcos Vega llegó ayer en una avioneta procedente de Dakar (Senegal) y en cinco horas puso firmes al jefe del Gobierno, Manuel Saturnino da Costa, a tres ministros -entre ellos el de Interior- y a los máximos responsables de la policía. El mensaje de queja fue el siguiente: España pagó 50.000 dólares (más de seis millones de pesetas) al Gobierno e Bissau para que identificara y revolviera a sus países de origen 50 inmigrantes africanos expuslados de España.La muerte de Ahire Naruna Waifo, el nigeriano de 2:5 años que el lunes recibió un tiro, ha cambiado radicalmente la situación de sus compañeros de- inforunio. España, que hace tres mees los metió en un avión militar los abandonó en medio de frica, ha vuelto al lugar del su-ceso. Y se ha encontrado con que el problema se agranda por días.

Al tiempo que Vega se reunia con el Gobierno, el presidente de la Liga Guineana por los Derechos Humanos (LGDH), Fernando Gomes, anunció: "Si España no está dispuesta a recibir de nuevo a los expulsados, deberá negociar con ellos el pago de una indemnización".

Fondos reservados

Gomes, que compareció junto a uno de los ocho inmigrantes que se encuentra en fuga, reclamó para los expulsados a GuineaBissau un tratamiento parecido al de los que fueron llevados a Mafl, cada uno de los cuales recibió 250.000 pesetas de los fondos reservados de Interior.La respuesta del asesor delministro Jaime Mayor Oreja, sin embargo, fue contundente. Marcos Vega declaró que España no dará ni un duro más. 'Tas autoridades guineanas me han asegurado que ya están haciendo las gestiones necesarias con Nigeriay Camerún (de donde proceden 34 de los deportados) para que en los próximos días sean repatriados sin más demora. Ahora el problema de los inmigrantes africanos compete a las autoridades de sus países de origen".

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pr mLos protagonistas de esta historia no están de acuerdo. Fernando Gomes, que ayer actuó de portavoz, dijo que "el problema. siaue siendo también de España, un país que se dice democrático y que cometió un grave delito contra los derechos del hombre". Gomez añadió que España "drogó y expulsó en aviones militares a 50 personas contra su voluntad". El líder de la LGDH también criticó a su país por "recibír dinero de un país europeo para maltratar a otros africanos".

El funcionario español intentó contrarrestar las acusaciones de la LGDH ejerciendo como diplomático. Descartó que España se haya convertido en el cancerbero de Europa, ya que 1a legislación española en materia de inmigración es de las más avanzadas ' y siguen estando las puertas abiertas a gran cantidad de extranjeros que se están instalando en Espafla".

Marcos Vega se refirió también a las redes mafiosas que funcionan en el norte de Marruecos, y que instruyen a los inmigrantes, siempre a cambio de dinero, para evitar su expulsión de España una vez que han conseguido entrar ilegalmente. .

Un periodista guineano le preguntó a Vega si los deportados eran criminales, y de ahí la dureza del trato que recibieron en España. El asesor de Mayor Oreja respondió: "Yo creo que no. El problema fue que en España no tenían documentación. Sólo sabíamos de ellos que habían entrado ilegalmente, que habían levantado falso testimonio en la policía y delante de los jueces y que, finalmente, habían provocado graves incidentes en Melilla. Poreso se les expulsó".