Menores nigerianas que piden asilo en Holanda acaban en prostíbulos belgas

Decenas de jóvenes nigerianas que llegan a Holanda solicitando asilo desaparecen pocos días después de los centros de acogida. Las muchachas, casi todas menores de edad, reaparecen en los escaparates de prostitución de la ciudad belga de Amberes, según el diario holandés Trouw.Al principio de este año, la extraña y continua desaparición de varias jóvenes de uno de los centros especiales para menores causó una gran conmoción en Holanda. Todas tenían dos puntos en común: carecían de familia en el país y tenían entre 12 y 17 años. Aunque ya entonces se barajó insistentemente la tesis de que estuvieran siendo secuestradas para la prostitución, las autoridades holandesas advirtieron que las menores podían desaparecer ya para huir como ilegales al negárseles la solicitud o para unirse con conocidos y familia e incluso volver a su país.

La policía, no obstante, realiza desde entonces investigaciones. El caso de las muchachas nigerianas que desaparecen siempre en el plazo máximo de una semana después de llegar, hizo sospechar que había algo más. "Es una red organizada que comienza en Nigeria", ha declarado el jefe de la unidad de tráfico de mujeres de Bélgica, teniente coronel John Allaert. "Creemos que altos cargos de las autoridades nigerianas están implicados. Según Allaert, Holanda es el país de preferencia de estas bandas criminales, porque las autoridades no repatrian inmediatamente a los menores y además distribuye a los solicitantes de asilo por edades, lo que facilita la búsqueda a los delincuentes que esperan a la! menores a la puerta misma de los centros de acogida. De allí son trasladadas a Bélgica, donde se las entrena para ejercer la prostitución.