Los Estados alemanes deciden repatriar a unos 320.000 refugiados bosnios

Alemania repatriará a los 320.000 refugiados bosnios, según las cifras oficiales, que llegaron al país huyendo de la guerra en la antigua Yugoslavia. La medida ha sido protestada por Los Verdes y medios intelectuales y calificada de "irresponsable" por la ONU. La decisión, adoptada el pasado jueves por los ministros del Interior de los länder (Estados federados), comenzará a aplicarse de forma flexible el próximo 1 de octubre.

Cada land podrá decidir por su cuenta la forma en que aplica la orden. Algunos Estados consideran inhumano repatriar ahora, en vísperas del invierno, a bosnios que se encontrarán sin hogar y trabajo en su país, y han decidido aplazar la medida hasta la próxima primavera. No obstante, el Ministerio del Interior de Berlín, donde gobierna una gran coalición formada por democristianos y socialdemócratas, anunció que se iniciará la repatriación el 1 de octubre, si es preciso con medidas coercitivas. En términos parecidos se pronunció el Ministerio del Interior de Baviera, donde gobiernan en solitario los socialcristianos. Portavoces del partido eco-pacifista Los Verdes acusan a los ministros del Interior y al Gobierno de Bonn de falta de humanidad y piden que el retorno a Bosnia se realice de forma voluntaria.

Al mismo tiempo, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) lamenta la decisión. alemana, porque "las condiciones de Bosnia no permiten por ahora un retorno obligado". Según portavoces del ACNUR en Sarajevo, devolver este año un número elevado de refugia dos a Bosnia "es irresponsable y preocupante".

Cuando los ministros de Interior llegaron el jueves a su reunión de Bonn, en la que adoptaron el controvertido acuerdo, un grupo de manifestantes les esperaba con pancartas en las que se leía: "¡Nuestro hogar ahora está aquí!, señor Kanther [ministro federal del Interior]!. Los que. quieran quedarse deberían poder hacerlo", y "¡No nos manden al invierno!".Ni las peticiones de los refugiados que se manifestaban en Bonn, ni los escritos de protesta firmados por políticos verdes e intelectuales, como el cantautor Wolf Biermann y el sociólogo Jürgen Habermas, surtieron efecto.La suerte estaba echada. Los ministros del Interior optaron por la solución más dura, en cuanto a la fecha de retorno de los refugiados, el 1 de octubre, pero luego la suavizaron al dejar abierta la aplicación, al albedrío de cada land. Se trata de aplicar la medida con el menor daño posible.Para ello, se tratará de repatriar en primer lugar a los solteros o parejas sin hijos y se buscará hacerlo en lugares considerados seguros. A pesar de ello, resultará imposible impedir penalidades e incluso situaciones de peligro. Muchos de los refugiados bosnios son musulmanes que ahora se pueden ver obligados a regresar a lugares controlados por serbios.

La agencia alemana de prensa DPA cifra en torno a 330.000 el total de refugiados bosnios residentes en el país, que ha acogido a un número mayor que el resto de las demás naciones de la Unión Europea.

Entre los ministros del Interior se producen discrepancias. Alguno critica que se envíe a estas pobres gentes al invierno sin cobijo. Otros replican que "los invitados no pueden quedarse para siempre a vivir en la casa que los recibió".