Zedillo anima al PRI a adoptar una nueva ética política
La democracia en México pasa inevitablemente por la transformación del partido de Estado que cumple ahora 67 años en el poder. Éste fue el mensaje con el que el presidente Ernesto Zedíllo pidió ayer el apoyo del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) para culminar la reforma política. Justificó su petición con una razón de peso: "La democracia es la mayor exigencia de los mexicanos".El pronunciamiento, efectuado en un desayuno con la cúpula oficialista, a tan sólo seis días de la Asamblea Nacional que fijará las bases de la transformación interna, es una defensa de la línea reformista impulsada por el presidente del PRI, Santiago Oñate, que busca además neutralizar la embestida al cambio que se perfila desde sectores duros. "Los priístas reafirmamos nuestro compromiso con una nueva ética politica", señaló Zedillo.
Zedillo intentó convencer de que la reforma no va a suponer el acta de defunción del partido de Estado más viejo del mundo.
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