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Ronaldo ilustra un partido ridículo,

El Barcelona sólo, pudo derrotar al Larnaca con dos goles del brasileño.

Àngels Piñol

El Barça se atascó ayer en su exilio de Montjülic y se agarró, cuando más perdido estaba, cuando más lo necesitaba, a la genialidad de Ronaldo. El brasileño se bastó por sí solo para encarar un partido que se puso muy incómodo. El grupo de Robson tuvo un triste bautismo europeo y sólo fue capaz de marcar dos goles a un equipo formado por parados y carpinteros. El Larnaca, un discretísimo conjunto de Chipre, llegó incluso a creerse la frase de su técnico de que una vez cada 100 años un club como el suyo podía dar la sorpresa.'Vítor Baía y Ronaldo, las dos columnas del Barça de Robson, impidieron al Larnaca entrar en la historía. Pero habrá necesariamente un partido de vuelta. La montaña olímpica no fue mágica anoche para el Barça. El estadio de Montjuïc dejó al descubierto mucha grada, poco público y la improvisación de la directiva, que decidió cambiar de escenario a toda prisa. En ese desangelado marco, hasta se oían más los gritos de ánimo de un centenar de seguidores chipriotas que. los que surgían de las gargantas azulgrana. El partido moría de inanición hasta que Ronaldo, que dijo a la brava que quería actuar en Montjuïc para no lesionarse en el Camp Nou, sentenció.'

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Las prisas no dejan tiempo ni para experimentar con un equipo chipriota de sólo dos años de vida. Hasta siete jugadores extranjeros conformaron la alineación del Barça. El estreno europeo supuso el envío a la grada del mallorquín y el debut de Blanc, mucho menos aparatoso que el portugués Couto, no inscrito en la UEFA, y de dos hombres que no lucieron en exceso dirigiendo al equipo: Popescu y Prosinecki.

E Barça, con el mariscal rumano y las florituras del croata, se encalló en la salida. El equipo sigue partido en dos. Sin un corazón que le dé vida, sin un alma que le dé sentido, el Barça vivió apelotonado en el medio del campo y sin demasiadas ideas. Y acabó estréllándose contra la bien ordenada defensa del AEK Larnaca. Hasta que apareció Ronaldo, el crack. El brasileño tiene una virtud impagable: ni se esconde ni tiene miedo en reivindicar su papel de rey.

El Larnaca no se conformó tras el primer gol de Ronaldo con la foto de recuerdo que se hizo en el Camp Nou. Renunció a su papel. de samaritano. Klimis, tras un error de Luis Enrique, se plantó ante Vítor Baía, que paró el balón.

El susto reactivó al Barça: la respuesta fue un remate al palo de Figo y una virtuosa acción de Prosinecki., Llegaron luego los gritos dificíles de disociar: los de ánimos y los silbidos. Robson entendió el irritado mensaje de la afición y dio la alternativa a Guardiola y Roger, dos hombres de la casa aplaudidos a rabiar. Guardiola asumió la batuta y el equipo empezó a triangular y darle verticalidad al juego. Fueron los mejores minutos, los de las mejores ocasiones, sellados, otra. vez, por Ronaldo, que acabó echando aceite a un debut europeo que chirrió en exceso.Resultados

Nimes (Francia), 3; K. Honved (Hungría), 1. Sturm Graz (Austria), 2; Sparta Praga (Rep. Checa), 2. Constructorul (Moldavía), 0; Galatasaray (Turquía), 1. Kaiserslautern (Alemania), 1; Estrella Roja (Yugoslavia), 0. MyPa'47 (Finlandia), 0; Liverpool (Inglaterra), 1. Sion (Suiza), 2; Niva Vinnitsa (Ucrania), 0. Aarhus (Dinamarca), 1; Olimpia (Eslovenia), 1. Círculo Brujas (Bélgica), 3; FK Brann (Noruega), 2. Lokomotiv Moscú (Rusia), 1;Varteks (Croacia), 0. Reykjavik (Islandia), 0; AIK Estocolmo (Suecia), 1. Benfica (Portugal), 5; Ruch Chorzow (Polonia), 1. AEK Atenas (Grecia), 1; Cheimion Humenne (Eslovaquia), 0. Gloria Bistrita (Rumania), 1; Fiorentina (Italia), 1. Dinamo Batumi (Georgia), 1; PSV Eindhoven (Holanda), 1. Vaduz (Liechestein), 0; París St. Germain (Francia), 4.

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