Repsol abre una guerra comercial al rebajar entre 1 y 3 pesetas el precio de sus gasolinas

El grupo petroquímico Repsol inició ayer la guerra de precios de las gasolinas, largamente reclamada por el Gobierno y esperada por los consumidores. En una decisión sin precedentes, el grupo que preside Alfonso Cortina ha decidido bajar el precio de sus gasolinas en una peseta por litro como mínimo; pero, en función de gasolineras y zonas, la rebaja puede ser de dos y hasta tres pesetas. Además, promoverá una reorganización en su área comercial y sorteará automóviles entre sus clientes. El recorte de precios, que tiene como objetivo aumentar cuota de mercado, causó un verdadero terremoto en las firmas competidoras. Cepsa, segunda sociedad por ventas, auncia un a respuesta inmediata.

Repsol, el grupo petroquímico con un 10% de participación pública, ha iniciado una guerra comercial abierta contra sus competidores españoles y extranjeros con el objetivo de mantener primero y recuperar después cuota de mercado, amenazada por las multinacionales y los hipermercados. Las gasolineras de Repsol bajaron desde ayer en una y dos pesetas el precio del litro de gasolina súper y también entre una y dos pesetas el precio del litro de gasolina sin plomo de 95 octanos, siempre respecto a los precios máximos (118,4 pesetas el litro de super y 112,7 el litro de sin plomo, que quedarán, como mínimo, en 117,4 y 111,7 pesetas respectivamente). Esta decisión implica una reducción inicial de los ingresos de Repsol durante este ejercicio (quedan cuatro meses) evaluada entre 1.400 y 1.600 millones de pesetas, que la compañía espera rentabilizar con un crecimiento de la cuota de mercado.La reducción del precio, el primer paso serio que se da en el sector petrolero para introducir un descenso real en beneficio del consumidor a partir de la cuasi liberalización impuesta por el sistema de precios máximos, no será uniforme y estará en función de las zonas y de la proximidad de la competencia de otras estaciones de servicio o hipermercados. Así, la reducción mínima será de una peseta (caso de las estaciones de servicio instaladas en Madrid, por ejemplo); pero en zonas costeras, como Cataluña y Levante, será de dos e incluso llegar a tres pesetas. La compañía tomará -la decisiones de precios gasolinera a gasolinera, con los condicionantes mencionados. Se aplicará en las estaciones de Repsol, Campsa y Petronor.

Además de la reducción de precios, insólita en las grandes petroleras que operan en España, que fijan sus precios muy cerca de los máximos, Repsol efectuará un sorteo diario de un coche Ford Escort entre los clientes de sus gasolineras (un número por cada 1.000 pesetas de gasolina) hasta el próximo 6 de octubre; y sorteará cada semana un Ford Escort Cossworth similar al de Carlos Sáinz también entre esos números. Los coches son gratuitos para Repsol. La compañía Repsol efectuará una reorganización de su área comercial que se conocerá esta semana.

La decisión de Repsol, adoptada por el Comité ejecutivo de la sociedad en su reunión de ayer, tiene como objetivo recuperar la cuota de mercado de combustibles y aumentarla en lo posible. Fuentes de Repsol informaron que dicha cuota estaba descendiendo a un ritmo de entre 0,5 puntos y un punto por año, como resultado de la cadencia de apertura de nuevas gasolineras; como media, cada año se abren 250 gasolineras, de las cuales son de Repsol entre el 30 y el 40%. Además, los hipermercados, principalmente del área catalana, iniciaron, aunque en una venta marginal, la guerra de precios para atraer clientes mediante la reducción de entre dos y tres pesetas el litro de gasolina.

Conmoción

Repsol baja sus precios mediante una reducción directa de su margen comercial. Cada peseta que baje, pues, se traducirá en una peseta menos de ingresos. El margen bruto para una refinera como Repsol está, en sus mejores momentos, entre 17 y 18 pesetas por litro como media. Con ese margen debe pagar el transporte, el almacenamiento, los costes financieros, el margen para los gasolineros, etc., hasta llegar a un margen entre 5 y 7 pesetas para el refinador y el marketing. Está por ver que el resto de las compañías que venden gasolina puedan hacer lo mismo.

La rebaja de Repsol causó una conmoción. general en las comercializadoras de gasolina. Cepsa, segunda petrolera española, anunció a EL PAÍS que su consejo decidirá hoy la "respuesta que deba adoptarse", aunque las mismas fuentes indicaron que "si la compañía que tiene el 55% del mercado baja los precios, pocas respuestas quedan", en evidente alusión a la inevitabilidad de bajar también los precios.

Las fuentes consultadas indican que la rebaja del precio de las gasolinas impuesta por Repsol obligará al resto de las compañías a reducir sus márgenes comerciales. "El momento es especialmente malo, por la coyuntura del petróleo en el mercado internacional", indicaron. "Es muy dudoso -analizan los expertos- que las compañías pequeñas puedan responder de la misma forma sin que sus cuentas de resultados arrojen grandes pérdidas. Aunque, probablemente, las firmas multinacionales se mantendrán, incluso con números rojos, por cuestiones estratégicas. En cuanto a hiper y supermercados, su caso es diferente; al fin y al cabo, sus ventas son marginales y la cantidad que se vean obligados a rebajar en el litro de gasolina siempre pueden repercutirlo en los productos que compran sus clientes".