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La OMS urge ayuda psiquiátrica para un millón de bosnios

Los musulmanes son los más afectados

La Organización Mundial de la Salud (OMS) acaba de hacer una llamada de atención urgente sobre la situación psicológica y psiquiátrica creada en Bosnia-Herzegovina, como secuela directa de la guerra. El director de la oficina regional de la OMS para Europa, Jo Asvall, asegura que, al menos, un millón de niños y adultos, musulmanes la mayor parte, necesitan atención especializada en este país.

"La situación es alarmante por la insuficiencia de medios y personal adecuados, además de las restricciones a la libertad de movimientos tanto para los enfermos como para los médicos", indica Asvall. "La guerra ha dejado secuelas graves en centenares de millares de ciudadanos enfrentados durante casi cuatro años a la violencia, la tortura, el sufrimiento y la muerte subraya. "El problema de estas personas que sufren angustia y depresiones puede tener consecuencias trágicas si no se ataja pronto".Como un botón de muestra, el jefe médico del hospital psiquiátrico de Tuzla, Kasim Brigit, explica a lo que se enfrenta cada día: "Tensión psicológica, agresividad, suicidio, sentimiento de que el futuro no existe, espiral de drogas, alcohol. Su rostro se ensombrece cuando se le pregunta sobre la ayuda que recibe. "Tenemos pacientes que sufren problemas mentales crónicos, viejos combatientes traumatizados, mujeres y niños traumatizados", responde. Según indica, sólo en la región de Tuzla cerca de 50.000 personas padecen secuelas psicológicas serias."Desgra-

ciadamente tengo que decir que hemos recibido muy poca ayuda".

La OMS empezó el pasado año por poner en marcha programas de terapia destinados a los propios agentes sanitarios de la zona con el objetivo de ayudarles a vencer primero sus propios traumas de la guerra para ayudar después a sus pacientes. En 1995, esta organización distribuyó un total de 373 lotes de medicinas por todos los hospitales de la ex Yugoslavia que contenían psicofármacos para tratar a 18.650 pacientes cada mes. "Pero esto no es suficiente, ya que el número de pacientes no cesa de aumentar", subraya Asvall. El restablecimiento de la estructura hospitalaria en Bosnia-Herzegovina, fuertemente dañada por la guerra, "requerirá al menos cinco años", insiste.

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