"En Madrid faltan pisos de emergencia para ex prostitutas"

Una furgoneta es su base de operaciones. Cada noche, la Asociación para la Prevención, Reinserción y Atención de la Mujer Prostituta (APRAM), coordinada por Rocío Nieto, una abulense de 50 años, recorre con ella la Casa de Campo, Méndez Álvaro, Montera, Desengaño o Capitán Haya. Zonas calientes por las que van prestando apoyo social, legal, formativo y sanitario a las prostitutas. En septiembre, cuatro mujeres, que dejaron la calle comenzarán a trabajar reciclando tintas y aparatos informáticos en uno de los talleres de la asociación. Desde este verano, venden también en el Rastro dominical los productos artesanos elaborados por ellas. Son algunos frutos de una tarea de casi una década desde el centro de acogida de la Plaza del Ángel, 14. Una dedicación no exenta de amenazas de proxenetas y grupos fascistas. Desde enero, en coordinación con los Servicios Sociales municipales, se dedican de forma especial a las prostitutas toxicómanas del gueto de Méndez Álvaro. "Ahora lo que más me preocupa, es la prostitución de menores escondida detrás de esos anuncios que ofrecen chicas y chicos sin vello".Pregunta. ¿Ha aumentado la prostitución de menores en Madrid?.

Respuesta. Yo creo que no, pero casos como el del Arny sevillano han destapado algo que ocurre desde hace años.

P. ¿Y que hace APRAM?.

R. Darse a conocer para que los menores afectados sepan que pueden acudir a nosotras con toda confianza. Esos chavales nunca van denunciar su caso a la policía porque tienen miedo.

P. ¿Pretenden acabar con la prostitución?.

R. Mientras exista demanda, habrá prostitución. Hay que crear servicios de apoyo para quien es quieran dejarlo y para evitar situaciones de marginación.

P. ¿Tienen medios para hacerlo?.

R. Faltan cosas. Sería imprescindible disponer de más pisos de emergencia para mujeres que quieren dejar la calle. Tenemos dos, uno con seis plazas y otro con nueve para toxicómanas, pero es insuficiente y los albergues sólo ofrecen alojamiento temporal. Las situaciones extremas exigen soluciones rápidas. También habría que dar mayor apoyo económico a las prostitutas que están formándose para conseguir un empleo, porque, al dejar la calle, se quedan sin medios de vida.

P. ¿Y si alguien le replica que estas mujeres eligieron ser prostitutas?.

R. Las mujeres con las que trabajamos no quieren ser prostitutas. Para ellas es una forma penosa de sobrevivir o de obtener dinero para droga. Yo no hablo de la prostitución de lujo. Eso es otra historia.

APRAM. Teléfonos 420 17 08 y 36931 72.