Una violenta riada causa 22 muertos y decenas de heridos en el Pirineo de Huesca
Al menos 22 personas resultaron muertas y varias decenas heridas por la violenta riada que asoló desde la seis de la tarde de ayer y hasta la medianoche la zona del Pirineo de Huesca, según informó pasadas las dos de la madrugada de hoy la Delegación del Gobierno en Aragón. La localidad más afectada fue la de Biescas, donde la avalancha de agua y lodo devastó en pocos minutos un cámping en el que pasaban sus vacaciones unas 600 personas. La mayor parte de las víctimas eran precisamente clientes del mismo. Algunas de ellas se vieron arrastradas por el torrente cuando se hallaban en el interior de sus vehículos.
"Fue como una enorme ola", relataba anoche un testigo. El cámping Las Nieves quedó destruido en pocos minutos. El agua comenzó a saltar por encima de coches y caravanas, arrastrándolos hasta el río Gállego. Uno de los rescatados explicó: "Se lo ha llevado todo: caravanas, coches, calles... Sólo ha quedado en pie la recepción". A primeras horas de la madrugada había vahos cadáveres en los torrentes y decenas de personas permanecían agarradas a los árboles y los salientes del terreno en espera de los equipos de salvamento. Las autoridades no se atrevían a aventurar una cifra de desaparecidos.Fuerzas de la Guardia Civil, del Ejército y voluntarios continuaban durante la madrugada los trabajos para rescatar a las víctimas. Ninguno de los fallecidos ni de los heridos había sido identificado anoche en los centros de emergencia habilitados en Sabiñánigo, Jaca y Escuer.
La fuerza de la tormenta arrancó de cuajo el puente sobre el río Arás, que estaba desbordado. La carretera A-136 y otras próximas se encontraban cortadas debido a las avalanchas de agua y cieno procedentes de los estrechos barrancos por los que corría la tromba.
