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El alcalde dice que la Unión Europea impide la instalación de incineradoras

José María Álvarez del Manzano, regidor de Madrid, descubrió ayer una carta europea a favor de la incineradora de Valdemingómez. Tras regresar de París, donde se encontró con alcaldes europeos e iberoamericanos, declaró: "Se nos ha pedido a todos los alcaldes desde la Comisión de la Unión Europea que hagamos un tratamiento completo de las basuras. Es decir, que los ayuntamientos que no los tengan que incorporen los procesos de reciclado y de incineración".

El alcalde se apoyó en est e presunto ruego de la Unión Europea para combatir el frente antiincineradora de Valdemingómez (la Fiscalía de Madrid, la izquierda local y regional, asociaciones de vecinos, el municipio de Rivas Vaciamadrid y todas las asociaciones ecologistas). "Yo traigo el consejo de instalar la planta de incineración, porque se considera muy conveniente para el medio ambiente que se culmine el proceso de reciclado, ateniéndose siempre, como es lógico, a las normativas europeas o a las que dicte cada país", explicó Álvarez del Manzano.El Gobierno de la Comunidad de Madrid, del Partido Popular, gestiona el tratamiento de las basuras en 176 municipios de la región, pero debe ignorar las recomendaciones europeas, pues ha descartado la incineración en sus propuestas de futuro.

La incineradora de Valdemingómez, que arrancó en enero, ha costado 20.000 millones de pesetas a una empresa privada (Tirmadrid, de Dragados). Aún no ha culminado la primera fase de puesta en marcha (para la que ha pedido una prórroga de seis meses) ni se han llenado los tres hornos totalmente (pueden quemar 600 toneladas diarias; Madrid produce 3.000).

Recurso de la fiscalía

La Fiscalía de Madrid recurrió su puesta en funcionamiento ante la Comunidad de Madrid. El consejero de Medio Ambiente, Carlos Mayor Oreja, desestimó este recurso. Emilio Valerio, fiscal de Medio Ambiente, presentó el mes pasado una demanda ante el Tribunal Superior de Justicia de Madrid en la que pedía que peritos judiciales vigilen las emisiones de la planta a la atmósfera.Las primeras mediciones han registrado "en torno" a 0,1 nanógramos -partículas altamente tóxicas- por metro cúbico de aire. Ése es el límite que la Comunidad de Madrid puso para autorizar el funcionamiento de la caldera. Si se supera, se cerrará. El concejal de Medio Ambiente, Adriano García Loygorri, anunció que en los próximos meses "mejorarán los resultados".

El alcalde anunció ayer que el Ayuntamiento va a continuar con la puesta en marcha de la incineradora, y aclaró que la construcción de nuevos hornos en Madrid dependerá de la cantidad de basura que se vaya eliminando en la planta existente.

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Su edil de Medio Ambiente aseguró unos días antes que la construcción del nuevo vertedero de Madrid -Valdemingómez agotará su capacidad en los próximos meses- no incluirá una nueva incineradora, sino tan sólo una planta de recuperación de vidrio, metal, papel y materia orgánica.

La visita del alcalde a París le ha regalado sólo buenas noticias. Una más: "Se ha puesto nota favorable a la gestión realizada por el Ayuntamiento de Madrid, que es la única ciudad europea, junto a París, donde se recoge la basura a diario. También se ha hablado de la importancia del tratamiento de las aguas y se ha puesto como ejemplo el tratamiento integral que se hace en Madrid, lo que posiblemente nos estimule para acometer el segundo plan de saneamiento integral".

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