Kim Jong II, presentado como sucesor a los dos años de la muerte de su padre
Kim Jong II, el hijo y delfín del fallecido presidente de Corea del Norte Kim II Sung, fue presentado ayer como el nuevo dirigente supremo del país en el segundo aniversario de la muerte de su padre, muerto de un ataque al corazón hace dos años sin dejar clara su sucesión. "El camarada Kim Jong II le va a suceder como dirigente para nuestra gran felicidad", manifestó un orador ante decenas de miles de personas reunidas en Pyongyang para conmemorar el aniversario de la muerte del Líder Supremo.
Kim Jong II tomará el relevo a su padre cuando, en 1997, acaben los tres años de luto oficial en lo que será la primera sucesión "dinástica" en un sistema comunista. En la actualidad ostenta los cargos de Secretario de la Comisión Nacional de Defensa y Comandante Supremo del Ejército de la República Popular Coreana. Ni la prensa partidista ni quienes intervinieron ayer escatimaron elogios para el pequeño Kim. "Seguiremos a Kim Jong II y respetaremos el plan de su ilustre padre, Kim II Sung. Kim Jong II nos dirigirá en el plan económico y el político", señaló uno de los oradores.Durante la transmisión de la ceremonia, la radio de Pyongang comparó al heredero con su padre, hasta el extremo de decir que son la misma persona. "Los éxitos del presidente Kim II Sung son valorados más conforme pasa el tiempo porque tenemos al camarada Kim Jong II. En otros términos, el camarada Kim Jong Il es el presidente Kim II Sung".
La prensa no se quedó atrás. En un editorial del Diario de los Trabajadores, el órgano del partido comunista en Corea, subrayó que no existía ningún "vacío político" en Pyorigang y que "la situación es radiante hoy porque el sucesor es ilustre". La televisión norcoreana apenas hizo otra cosa durante todo el acto que enfocar el rostro impasible de Kim Jong II.
Según Noriyuku Suzuki, analista de la agencia japonesa de noticias Radiopress, encargado de estudiar la actualidad de Corea del Norte, la ambigüedad de los discursos indica que "Kim Jong II se quedará donde está al menos un año más". El heredero necesita aún consolidar el apoyo de las fuerzas armadas, que no confían plenamente en él.
