Mascarada electoral en Mostar
( ... ) Mostar, vitrina de la Federación Croatomusulmana, ( ... ) Beirut balcánico que la Unión Europea se empeña en reconstruir y reunificar. ( ... )Es cierto que los partidos musulmanes han levantado sus consignas de boicoteo. El acuerdo alcanzado el 26 de mayo por los hermanos enemigos, con el aval de los mentores de Zagreb y de Sarajevo, amplió el censo electoral a los exiliados: Los refugiados que viven en el extranjero podrán cumplir su deber cívico en Alemania, Suiza, Suecia y Noruega. Asimismo, la Administración europea, cuyo mandato termina en julio, se compromete a escoltar a los desplazados hasta las urnas. Generosa utopía. ( ... )
Si el español Ricard Pérez Casado, sucesor del alemán Hans Koschnick en el cargo de administrador de la ciudad, hace gala de una confianza que desarma, las dudas corroen a sus subordinados. "Las elecciones", admite uno de ellos, "deben ser la guinda del pastel. ¡Un pastel que se empieza por la guindal ¿Para qué sirve votar si no hay ni seguridad, ni libertad de movimientos, ni verdadera justicia, ni policía digna de este nombre? Lejos de consolidarse la paz, la efervescencia electoral corre el riesgo de hacer estallar un nuevo conflicto". Otros, más desconsolados todavía, denuncian una mascarada electoral de la que emergerán, santificados por las urnas, criminales y jefes de bandas.
23 de junio
