Más sobre la UPV-EHU y el terrorismo

Sin ánimo de terciar en el cruce de cartas entre Fernando Savater y Gregorio Monreal y E. Knörr, con exclusiva intención de aportar datos que me constan como miembro de la Facultad de Derecho de San Sebastián y decano de la misma durante ocho cortos años, tengo que decir, ante la afirmación del profesor de Madrid de que "nada se hizo" -suspensión de clases, manifestaciones o concentraciones de protesta ni manifiestos, etcétera-, con ocasión de los asesinatos de Juan de Dios Doval y Broseta, lo siguiente:Pasa a la página siguiente Viene de la página anterior 1. Nada más conocerse el asesinato de Juan de Dios Doval, profesor de Derecho Procesal, en diciembre de 1980, se suspendieron las clases de la facultad, organizándose una manifestación desde la misma hasta la Diputación Foral, paralizándose el tráfico por la N-I, dirigidos por el decano a la sazón, Gregorio Monreal. Esa misma tarde, reunida la junta de facultad, se acordó mostrar la repulsa por el asesinato, suspender toda actividad académica para el día siguiente, celebrar en la propia facultad un funeral de cuerpo presente y realizar un acto académico en recuerdo del compañero en el paraninfo de la facultad.

2. En cuanto al asesinato del profesor Broseta, el día 16 de enero de 1992, se reunió la junta de la facultad y se acordó, sin votos en contra, manifestar públicamente su inequívoca condena del atentado, así como "todas las demás actuaciones violentas de ETA, que son humana y éticamente irredimibles y políticamente destructivas", convocando a todos los miembros de la facultad a una concentración a las once de la mañana frente a la facultad, suspendiéndose todas las actividades académicas. Concentración que resultó muy numerosa, leyéndose el comunicado de la junta.

Estos son los hechos de respuesta de un centro de la UPV-EHU, que desde perspectivas diferentes pueden ser calificados como suficientes o insuficientes, pero que, en manera alguna se pueden obviar. La reconocida memoria del profesor Savater al parecer no alcanza a "las turbulencias" de los años más difíciles, probablemente porque tampoco algunos nos acordamos de él en aquella época. Dicho sea que, principalmente en temas de terrorismo, todos los intercarteados nos hallamos en el presente en el mismo lado de la barricada.-