"La pasión del hombre es universal"

La contradicción dialéctica permanente: así es Carlos Gurméndez, filósofo, escritor y periodista y así su obra Ontología de la pasión, que presentó ayer en Madrid. La Ontología... es, en realidad, síntesis de sus obras, anteriores, principalmente las dos últimas, Crítica de la pasión pura, tomos I y II, donde llegó a descubrir que hay una pasión universal, englobadora de todas las pasiones unilaterales.Dicho así, parece fuerte. E n realidad la Ontología... es un libro profundo, escrito mediante un vocabulario cuidadísimo no sólo por la solidez y galanura literaria del autor sino por la necesidad de precisar los conceptos de un razonamiento complejo encaminado a demostrar la posibilidad de llegar al hombre total; el que se tiene a sí mismo como objeto y puede desarrollar su producción espiritual, iniciándose lo que Gurméndez llama una, ontología dialéctica histórica.

"Toda mi obra está basada, efectivamente, en contradicciones dialécticas", dice Carlos Gurméndez, autor de El yo y el nosotros, Teoría de los sentimientos, Tratado de las pasiones, entre otros títulos. "Ya en estas obras", continúa Gurméndez, "se iba perfilando el descubrimiento que desarrollo en la Ontología: "Hay una pasión englobadora de todas las pasiones unilaterales. Si se entrega a una pasión unilateral, el hombre se destruye; sólo una pasión múltiple lo puede enriquecen En el tomo segundo (le la Crítica de la pasión pura descubro la unidad de la sensación, de la impresión, de la emoción y restantes unidades psíquicas pequeñas; en una gran unidad psíquica, que es la pasión universalizada".

Pero ¿no hay diversos estadios de la pasión? ¿No se interioriza el hombre, se vierte hacia sus semejantes y hacia el Universo, luego el Universo hacia el hombre y todo lo demás en sentido inverso? Gurméndez cree que sí, aunque introduce la contradicción dialéctica entre pasión y sentimiento; y cita a Hegel: "Sus Escritos de Frankfurt lo explican cuando dice que el sentimiento nos aísla y escinde, y que es preciso poseerse para unificarse. Esto prueba la necesidad de la pasión: salir de sí mismo para entrar en el otro". ¿Qué es entonces la pasión?", preguntamos, y justo en ese instante, sobresaltando el discurso intenso de Gurméndez que materializa su tono quedo y su voz suave viene de la vecindad un grito desgarrado: "¡Goool!". La entrevista se celebraba en la casa del autor, precisamente el día y hora que la selección española de fútbol le marcó a Rumanía un gol inesperado. La vida tiene estas casualidades y Gurméndez ríe de buena gana la coincidencia. Bueno, "la pasión", dice, "es la objetivación del sentimiento; es encontrar otro ser al que entreguemos nuestro yo".

La Ontología de la pasión tiene dos partes: El reino de la materia y La materia sensible. ¿Cómo se engarza en ellas la pasión? "La universalidad de la pasión que descubro", comenta Gurméndez, "origina la pasión cósmica. Es la pasión terrestre y de ella nacen las pasiones humanas; pasiones teleológicas, que se unen a las pasiones más diferentes y opuestas. Todas son universales y totalizadoras., Sostiene Ortega en El tema de nuestro tiempo que estas pasiones ofrecen una diferente perspectiva individual. Por el contrario yo pienso que una verdadera ontología es una unidad del todo; o, dicho de otro modo, el reino de la materia".

¿Del reino de la materia al reino del hombre? Gurméndez aborda la cuestión en La materia sensible: "Los sujetos humanos estamos intercambiando experiencias con el mundo constantemente. La biología evolucionista, y los trabajos de Faustino Cordón, nuestro gran biólogo, nos han descubierto que ya en las prótesis globulares y en las células primigenias existe un foco de conciencia que intercambia experiencias con el medio ambiente, hasta llegar a la realidad del hombre. Igualmente es verificable la progresión del sujeto pasivo con un doble objetivo: lograr la supervivencia personal e incrementar la conciencia. Es decir, que el Yo no se limite a una afirmación de sí mismo y aspire a realizarse en el Todo Uno. Una verdadera técnica", concluye Gurméndez', "abre las perspectivas para llegar el reino de la libertad, con el hombre liberado de la subjetividad egotista".

Estos razonamientos expuso Carlos Gurméndez en la Librería México, durante la sesión filosófica que supuso la presentación de la Ontología de la pasión (Fondo de Cultura Económica) en la que también participaron José Luis Abellán, Margarita de la Villa, Ignacio Izuzquiza y Javier Muguerza.