El 'éxtasis', la gran amenaza para los adolescentes

El 100% de los chavales se inician en la droga a través de hachís antes de terminar en la heroína. La novedad es que en medio del proceso han aparecido drogas nuevas, como las de síntesis. Son drogas fáciles de preparar, drogas de fin de semana, que dejan en los jóvenes secuelas psiquiátricas importantes. "Es una auténtica amenaza para ellos", dice Encarna Pinto, coordinadora de programas de Proyecto Hombre-Madrid, organización que acaba de recibir la Real Cruz de la Orden Civil de la Solidaridad.

La droga de diseño se ha convertido en elemento habitual de las tardes y noches de fin de semana para numerosísimos adolescentes y jóvenes españoles. "Va a haber un gran problema, es la gran amenaza para los adolescentes", advierte Encarna Pinto, "porque ya hemos visto algunos casos de jóvenes que ahora tienen 17 ó 18 años, habituados desde hace tiempo a las drogas de laboratorio, que necesitan tratamiento psiquiátrico específico. Y por supuesto existe el riesgo de muerte, porque lo cierto es que no saben lo que se meten: compran las pastillas dejándose guiar a veces sencillamente por el color y la forma".Las drogas de síntesis pueden ser fabricadas "sin grandes conocimientos de química, en casa, entre amiguetes, y luego vendidas a la puerta de las discotecas", señala Pinto. "Las leyes del mercado han empeorado el panorama: antes se ofrecía éxtasis y otros derivados de las anfetaminas; pero ahora ya han aparecido mezclas con alucinógenos tipo LSD, que pueden tener graves efectos sobre el sistema nervioso central, y desde luego también hay en las pastillas presencia de psicofármacos y, a veces, hasta de heroína".

La organización Proyecto Hombre está tratando en estos momentos a unos 40 adolescentes consumidores de droga en programas experimentales que pueden durar entre año y año y medio.

"Pertenecen a un nuevo tipo de drogadicto, aunque ni ellos, ni quizá la sociedad, les reconocen esa condición, porque aquí se sigue pensando que sólo es drogadicto el heroinómano puro y duro. Son chicos que nos traen las familias, en general no marginales, y a los que intentamos no sacar de su ambiente y fomentar todo cuanto les brinde apoyo: interesa que sigan con su vida familiar, con sus amigos no consumidores, con sus estudios".

Adicción generalizada

La drogadicción a las sustancias de síntesis constituye una amenaza real para los adolescentes, precisamente por lo decisivo de esa edad en la formación de la personalidad. "Los jóvenes viven expuestos a un sistema de adicción generalizada", dice Encarna Pinto. "Son adictos a determinados estilos de vida, de música, de comportamiento".La coordinadora de Proyecto Hombre insiste en que no conviene utilizar el sensacionalismo al tratar de drogas y menores: "Por supuesto que buena parte de quienes padecen el problema empezaron con menos de 18 años. Pero de ahí a que proliferen los niños drogadictos, y sobre todo heroinómanos, va un gran trecho".

De hecho, y a pesar de que según otros expertos aseguren que la edad media de los que se inician está bajando, Encarna Pinto cree que las cosas siguen estando en los mismos términos desde hace muchos años. "Puede haber casos como el del niño murciano heroinómano, pero no son ni mucho menos la tónica", dice. "Llevamos 12 años trabajando con drogadictos, y siempre hemos temido que bajase la edad de empezar a consumir heroína. No ha ocurrido. La heroína, por supuesto, sigue estando al fin del camino. Por decirlo esquemáticamente, antes se empezaba con porros, se seguía tal vez con alcohol, y se desembocaba en la heroína.