La crisis económica de 1995 costó a México 5,5 billones de pesetas
La crisis económica que azotó a México durante 1995 tuvo un coste para el país de unos, 5,5 billones de pesetas, cantidad total en que se incrementó su deuda pública, según informó ayer la Secretaría de Hacienda en México. Al cierre de 1995, según estos datos, la deuda pública mexicana creció en 275.810,7 millones de pesos, que equivalen a 42.894 millones de dólares de acuerdo con la cotización promedio de 1995.
El documento indica que la "deuda bruta del sector público presupuestario al 31 de diciembre de 1995 ascendió a 841.629,8 millones de pesos, lo que significó un aumento de 275.810,7 millones de pesos" (que equivalen a los 42.894 millones de dólares citados, unos 5,5 billones de pesetas al cambio actual).Según el Gobierno mexicano, el incremento de 227.544 millones de pesos en la deuda pública se debió "a un efecto contable de la revaluación de la deuda y otros 48.266 millones de pesos al endeudamiento neto".
Por su origen, la variación en la deuda pública se explica por un incremento del 291.012 millones en la deuda externa y una reducción de 15.201,3 millones de pesos en la interna, afirmó Hacienda. "En términos del producto interior bruto (PIB), el saldo de la deuda del sector público presupuestario aumentó del 45,2% al 53,3% de 1994 a l995", afirma el documento oficial.
Esta información explica el crecimiento de la deuda pública aunque aclara que el aumento no obedeció "al manejo irresponsable de las finanzas públicas sino a efectos contables de la revaluación de los débitos públicos". Según el informe, se debió a la aplicación de una política integral para sustituir deuda interna de corto plazo y elevado coste por deuda externa de largo plazo y de menor costo. Ello "contribuyó a disipar la amenaza de un colapso financiero y la inestabilidad de los mercados".
Por otro lado, la institución aseguró que el elevado coste y el actual nivel de la deuda pública, "su perfil de vencimientos y términos de contratación, no representan un obstáculo para la estabilidad y la recuperación de la actividad económica". A finales de 1994, ante la inminente salida de unos 11.000 millones de dólares, el Gobierno se vió obligado a dejar "flotar la moneda mexicana", lo que provocó una gravísima devaluación.
