EL BESO DE CHICAGO
Un ingeniero de Chicago de 36 años se considera el hombre más feliz del mundo por haber besado a la princesa Diana de Gales en la mejilla y ésta haberle devuelto el beso, aunque él ya no recuerda lo que le dijo la ilustre visitante de Chicago. La princesa visita desde el martes la ciudad norteamericana en busca de fondos para contribuir a las investigaciones y a la lucha contra el cáncer, y se espera que recoja más de 1,4 millones de dólares en favor de tres centros médicos. Ha sido mi día de suerte. Estaba muy excitado y estaba viendo cómo [la princesa] daba la mano y de repente me pregunté por qué darle la mano y no besarla. ¿Y si a ella no le importa?", comentó Joshep Zagal cuando contaba su aventura a los reporteros, que no consiguieron una foto del instante. Zagal dice que Lady Di le devolvió el beso en la mejilla y le dirigió unas cuantas palabras, que él ya no recuerda. El intercambio de besos entre la princesa británica y el ingeniero de Chicago se produjo en plena calle, en las cercanías de la casa del rector de la Universidad del Noroeste, que le ofreció el martes un almuerzo.-
