"Mi enemigo no ha sido Netanyahu, sino el Irán integrista"

Tras el debate televisado del domingo Simón Peres, de 73 años, sólo ha dormido tres horas. No habla de las numerosas llamadas telefónicas que recibió en su casa tras el debate. "No estaba en casa", dice... "Fue Sonia, mi esposa, la que contestó al teléfono. Una de las llamadas fue de Henry Kissinger; otra era de Helmut Kohl... Nunca han sido tan buenas mis relaciones con los jefes de Estado".Pregunta. ¿Por qué, según usted, los partidos religiosos han decidido apoyar a su rival?

Respuesta. Si se refieren a mi relación personal con la religión, no hay motivo para que prefieran a mi rival... Pero, poco importa... estoy convencido de que muchos religiosos me votarán.

P. ¿Está decepcionado por su actitud hacia usted?

R. No, no estoy decepcionado. Hace tiempo, se ocupaban únicamente de cuestiones religiosas. Ahora, se dedican esencialmente a la política.

P. ¿Cómo lo explica?

R. De religiosos, se han convertido en sólo nacionalistas. En vez de unir al pueblo, lo dividen.

P. Los últimos sondeos muestran que la diferencia entre usted y Netanyahu es muy corta.

R. Son los atentados los que han producido esta disminución de la diferencia. Aparte de esto, no conozco ninguna otra proeza de Bibi Netanyahu. Ha basado toda su campaña en el miedo y el terror. Nunca hemos tenido una cosa igual.

P. ¿Qué ha sentido frente a los mensajes de Netanyahu?

R. Durante todo este debate, me costaba creer lo que oía. Una persona sin ideología que proponía una paz segura sin hablar con Yasir Arafat y sin negociar con [el presidente sirio Hafez el] Asad; que propone una guerra contra el terrorismo parando el proceso de paz. Hay otras cosas que también me han llamado la atención. Propone a los palestinos una autonomía. ¿Acaso no sabe que ya la tienen? ¡Es elemental!

P. Una parte del pueblo piensa que usted va a dividir Jerusalén.

R. Porque el mismo pueblo israelí está dividido. Sobre todos los temas; incluso sobre Jerusalén.

P. Sin embargo, ha tenido en cuenta la opción de una autonomía municipal para los 160.000 palestinos de Jerusalén.

R. No hemos discutido nunca el reparto del municipio: nos hemos concentrado en la cuestión: "¿Se tiene que dividir o no Jerusalén?". Hemos decidido que no. Bill Clinton y el rey Hussein sostienen nuestra posición. La prueba es que hemos sacado a Jerusalén de la actual agenda de negociaciones sobre la autonomía.

P. ¿Sin embargo el Likud sigue declarando que los laboristas quieren repartir Jerusalén?

R. ¡Es mentira! Han vendido Jerusalén para ganar unos votos. Si vieran mis discursos desde 1947, no encontrarán ninguna alusión al reparto de la ciudad.

P. Como número dos de Isaac Rabin, usted era más audaz con respecto al proceso de paz.

R. No es cierto. Tras el asesinato de Rabin, he sido yo el que ha decidido continuar con el proceso de transferencia a la autoridad palestina del control de seis ciudades. Qué quiere usted... Hamás y la Yihad han sido los auténticos protagonistas en esta campaña electoral. Para nosotros el enemigo no ha sido Netanyahu, sino el Irán integrista. Hasta los últimos atentados terroristas tenía un ventaja de 16 puntos sobre mi rival. Tras los atentados, la gente pensaba que iba a derrumbarme. Sin duda, si no hubiese librado una batalla sin tregua contra el terrorismo, habría perdido estas elecciones. He luchado durante todo este periodo contra los intentos de paralización del proceso de paz. ¡Esto también es una batalla por la paz! Bajo mi punto de vista, ésta ha sido la batalla más grande por la paz.

P. ¿Acusa al terrorismo de haber provocado la reducción de la diferencia entre usted y la derecha? ¿Puede que usted no sea un candidato lo suficientemente atractivo para ganar estas elecciones?

R. ¿Ve a algún otro candidato? Le repito que los que han hecho mella en los laboristas han sido la Yihad, Hezbolá y los iraníes.

P. ¿Esto podría ser una explicación ante una posible derrota de los laboristas?

R. No tengo que dar ninguna explicación. ¡No se inquiete! ¡Ganaré estas elecciones!

P. Usted ha dicho que los asentamientos van a seguir.

R. No todos continuarán bajo la soberanía israelí. Lo que he dicho es que la mayoría de los colonos quedarán bajo la soberanía israelí.

P. Si gana estas elecciones el Likud le acusará de haberse beneficiado del voto árabe.

R. ¿Qué nos propone el Likud? Que neguemos a los árabes (israelíes) el derecho al voto. ¡Hasta Yigal Arrúr [acusado del asesinato de Isaac Rabin] tiene derecho a votar! Es un escándalo para la democracia el negar a una parte del pueblo el derecho elemental al voto por su pertenencia nacional. El pueblo judío, durante toda su historia, se ha rebelado contra esto.