Los rebeldes asaltan la comisaría de Argún, la tercera ciudad de Chechenia

Un comando guerrillero atacó en la madrugada de ayer Argún, la tercera ciudad en importancia de Chechenia. Tomó la comisaría local y otros edificios. Nadie opuso resistencia. Los independentistas huyeron después llevándose consigo armas, municiones y vehículos. También ayer, dos colaboradores de Médicos sin Fronteras (MSF) fueron secuestrados cerca de Grozni. Como rescate exigieron 200.000 dólares (unos 25 millones de pesetas), según un anuncio del Ministerio del Interior citado por la agencia Itar-Tass.El ataque contra Argún se produjo horas después de que un tren descarrilara debido a una explosión y del incendio del pozo petrolero más rentable de la república norcaucásica rebelde. Al ataque siguió el secuestro de los dos. colaboradores de MSF. Todo ello indica, según la mayoría de los observadores, que los independentistas chechenos han comenzado sus acciones de venganza por la muerte de su líder, Dzhojar Dudáiev.

Más de cien guerrilleros entraron en la madrugada del sábado en Argún al mando de Abú Jamzátov -hermano de Alaudí, famoso comandante muerto hace unos meses, quien en el verano del año pasado se apoderó de esta ciudad- y desarmaron a 20 policías que se encontraban en la comisaría local. Los separatistas también atacaron dos organizaciones rusas que trabajan en la reconstrucción de la ciudad y se retiraron llevándose ametralladoras, fusiles automáticos, pistolas, municiones, dos vehículos todoterreno y dos automóviles Volga como botín. Después de la huida de los guerrilleros, los partidarios de la independencia de Chechenia organizaron en esa ciudad, ubicada a 16 kilómetros al este de Grozni, un mitin en el que exigieron la retirada de las tropas rusas.

El grupo de Jamzátov parece ser el mismo que hizo explotar en la noche del viernes el tren de pasajeros que procedía de Argún con destino a la ciudad norosetia de Mozdok, la principal base militar rusa en el Cáucaso del Norte. Al menos dos personas que viajaban en el tren -una de ellas, un oficial- perecieron. Otras cuatro resultaron heridas.

Siete soldados murieron ayer y otros cinco resultaron heridos en Grozni debido a ataques guerrilleros. El mayor número de víctimas -seis- se produjo cuando los separatistas hicieron explotar un carro de combate ruso en la capital chechena.

[Uno de los cuatro jefes militares rebeldes, Ruslán Gelayev, dijo ayer a Reuter que sólo la intervención de las Naciones Unidas podría parar el conflicto. "Creo que una visión exterior es esencial porque esto no es un conflicto interno; es un conflicto entre Rusia y Chechenia. El único posible intermediario es la ONU... Si la ONU cierra los ojos seguiremos matándonos".]

Mientras, Alla Dudáieva, viuda del desaparecido líder checheno, declaró que desea ir a Moscú para entrevistarse con el presidente Borís Yeltsin con el fin de detener la guerra en la república rebelde. "No urdo planes secretos de asesinato. Iré a verle [a Yeltsin] con el corazón abierto y con el ánimo de salvar a Rusia", dijo Alla. La viuda de Dudáiev, de 49 años, es rusa, hija de un oficial del Ejército soviético, pinta y escribe poesías.