Un ejemplo del 'plan Rocard'
Una empresa con 10 trabajadores, digamos una pyme de lampistería, que les paga 8.000 francos al mes y tiene una carga social del 50%, 4.000 francos, esto es, una cotización por hora de unos 26 francos: quedan en 19 francos las primeras 32 horas, suben, a 58 las horas por encima de la jornada de 32. Si patrono y trabajadores no bajan a 32 de entrada, sino, digamos, a 34, el ahorro es del 28% de las cargas sociales. La Seguridad Social no cobra ese 28%. El salario permanece igual. Este 28% de cargas sociales representa algo más que el coste, cargas sociales incluidas, de un undécimo trabajador. La empresa del ejemplo contrata a otro lampista.Saldo de la operación. Primero, un nuevo contrato. Segundo, la empresa paga casi la misma deuda social pero para un asalariado en vez de diez, hay una pequeña ganancia de un 1%, pero ha perdido volumen de horas de trabajo, más o menos las correspondientes a. medio empleo. Tercero, no ha perdido pedidos. Cuarto, la Seguridad Social ha perdido el 28% de los ingresos que le suministraba esa empresa, 55.000 francos franceses por año.
Una cuarta parte los recupera porque recibe la cotización del empleado número 11. Otra cuarta parte del menor gasto porque no debe abonar por él el seguro de desempleo. Queda la mitad. Pero la empresa sigue necesitando más volumen de trabajo. En muchos casos, podrá recuperarse la mitad de la financiación como consecuencia de la contratación de un decimosegundo trabajador, gracias al aumento de productividad generada por la completa reorganización de la compañía.
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