Clinton evita un apoyo explícito a Yeltsin de cara a las elecciones
El presidente norteamericano, Bill Clinton, evitó ayer apoyar abiertamente al líder ruso, Borís Yeltsin, de cara a las elecciones de junio próximo y justificó su decisión de reunirse con el comunista Guennadi Ziugánov."La posición correcta para Estados Unidos es no inmiscuirse directamente [en las futuras elecciones presidenciales rusas]. No es correcto que Estados Unidos o cualquier otro país le diga a la gente cómo votar", señaló ayer Clinton en una conferencia de prensa que dio al término de la cumbre del G-7 y después de pasear brevemente por la plaza Roja.
Clinton explicó que lo que sí hace EE UU es "apoyar una dirección". "Estados Unidos apoya el movimiento democrático y las reforma económicas", enfatizó, a tiempo que justificó su decisión de reunirse con Ziugánov -principal rival de Yeltsin en las próximas elecciones y, por el momento, el favorito según las encuestas- y otros líderes de la oposición. "Es algo que hago en todas partes", manifestó.
Clinton dijo haber tenido también "una muy buen conversación" con el prime ministro británico, John Major, sobre el problema irlandés. El presidente norteamericano declaró que opinaba que "el IRA debe restablecer e alto el fuego de inmediato".
Pero no todo ha sido positivo para Clinton en Moscú ya que no logró convencer a Yeltsin de que desistiera de vender un reactor nuclear a Irán. "Sigo oponiéndome fuertemente a ello, porque creo que es una mala cosa" declaró Clinton, asegurando que no se puede comparar Io que hace EE UU con Corea del Norte y lo que hace Rusia con Irán, aunque en ambos casos se trate de la venta de mismo, tipo de reactores. En el primer caso, explicó, disminuye la amenaza nuclear de Corea del Norte, mientras en el segundo aumenta el peligro de que Irán fabrique una bomba atómica.
