El Deportivo busca un milagro en París
Los gallegos, muy diezmados, son la esperanza española de optar a una final europea
El último cartucho europeo para el fútbol español se dispara esta noche en el Parque de los Príncipes de París (21.00, Antena 3), la vieja tumba de Real Madrid y Barcelona, y el altar en el que el Zaragoza se encaramó el año pasado a la gloria continental. Triste por su mala temporada y descangallado por las lesiones, el Deportivo, casi un novato en los torneos internacionales, se mide en ese escenario al París Saint Germain (PSG) en busca de un puesto en la final de la Recopa. Todo parece dispuesto en contra de los deportivistas: el marcador (0-1 en la ida), el rival (segundo en la Liga francesa), las lesiones de algunos de sus futbolistas más importantes y el estado anímico de una plantilla instalada desde hace meses en el desconsuelo. En estas circunstancias, sólo resta apelar al milagro.París recibió ayer a la expedición blanquiazul con semblante sombrío: gélida brisa y las inevitables gotas de lluvia que acompañan a los gallegos allá donde vayan. Nadie lo tomó como una premonición, quizá porque Toshack había repetido el día anterior que sólo con alegría se superan los malos trances. "No podemos encerrarnos entre cuatro paredes y salir acojonados", dijo el galés con su delicadeza de lenguaje habitual, "estos partidos son para disfrutar".
Toshack dio ejemplo durante el viaje paseándose por el avión con sonrisa dentífrica e incluso bromeando con los escasos aficionados que se apuntaron al vuelo chárter fletado por el Deportivo. "Vamos a ganar por lo civil o por lo criminal", prometió entre risas el galés a un grupo. de chavales de los Riazor Blues que le habían recibido con otra muestra de ironía. "!Qué bien vives en La Coruña con tanto marisco!", fue el saludo de la muchachada, diplomáticamente ignorado por Toshack.
A falta de seguidores, el equipo viajó arropado por todos los miembros de su Consejo de Administración -el presidente, Augusto César Lendoiro, hizo una excepción para interrumpir durante un día su frenética actividad política- e incluso por las esposas de algunos de los futbolistas. Las declaraciones abundaron en los tópicos, revestidos de un aparente optimismo. "Es una ocasión muy bonita y no hay que desaprovecharla", indicó Donato. "Aún es posible el milagro", insistieron los demás.
Los gestos comienzan a torcerse cuando se alude a las bajas. Ni siquiera Toshack puede disimular su contrariedad por las ausencias de Fran, Mauro Silva y sobre todo Djukic, quien desde hace semanas carga sobre sus hombros con gran parte del trabajo defensivo del equipo. Por faltar, faltará hasta David, el único futbolista, junto a Bebeto, que ha jugado últimamente un papel desequilibrante en el maltrecho Deportivo. Tan poca gente tiene Toshack a su disposición que incluso volvió a incluir en la convocatoria a Martín Vázquez, quien debutó el pasado domingo durante media hora tras ocho meses lesionado. "A pesar de todo", insiste Toshack, "no hay que perder la ilusión". Pero el propio técnico se delata cuando, en su lógico afán por levantar el ánimo, proclama que si el equipo llega a la final podrá disponer de "un centro del campo de lujo, con Martín Vázquez, Fran y Mauro Silva".
Puestos a encontrar argumentos favorables a los gallegos podría aludirse al momento dubitativo que atraviesa el PSG, a su ansiedad por alcanzar una final europea después de tres intentos fallidos o al desgaste de estar luchando en dos frentes, ya que en la Liga mantiene una cerrada pugna con el Auxerre. Además, en el Parque de los Príncipes, los parisinos se han mostrado este año como un conjunto vulnerable al contragolpe, el arma favorita de los blanquiazules. Hasta se puede esgrimir una teoría difícilmente rebatible: el PSG no es más equipo que el Deportivo. Tiene buenos futbolistas, es rápido y en Riazor mostró una notable capacidad organizativa para practicar el achique de espacios. Pero no viene de otro planeta.
Claro que el Deportivo tendría que enmendarse. Ese equipo lánguido, resignado y asténico que se pasea por la Liga está a merced de cualquiera, incluso de un rival con porte de Segunda como el Mérida, el último visitante en Riazor. Conserva, eso sí, a Bebeto, capaz de crear un gol de la nada. El brasileño es quizás la última esperanza para un partido que vale por toda una temporada y que marcará el futuro de un club cuya viabilidad económica está estrechamente ligada a la opción de seguir jugando en Europa.
¿Cómo recompondrá Toshack su equipo? Es un misterio. Probablemente organizará su defensa con Voro de libre con Paco y Ribera de centrales, y Donato y Viqueira jugando por delante de pivotes, según dejó entrever en el entrenamiento de anoche.
Alineaciones
París Saint Germain: Lama; N'Gotty, Roche, Le Guen; Fournier, Bravo, Guerin, Colleter; Nouma, Dely Valdés y Djorkaeff.
Deportivo: Liaño; Paco, Voro, Ribera, Alfredo, Donato, Viqueira, Villarroya; Manjarín, Begiristain; y Bebeto.
Arbitro: Alfredo Trentalange (Italia).
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