"Ya tengo imitadores"

Manuel González Savin (50 años), conocido artísticamente como Cañita Brava, se ha convertido en la estrella de El Semáforo. De actuar en verbernas gallegas ha pasado a ser visto por más de cinco millones de espectadores en la noche de los viernes. Este pintoresco cantautor, que interpreta sus canciones en indescifrables idioma, pasó de anónimo concursante a ser el personaje más popular del espacio que dirige Chicho Ibáñez Serrador. En La Coruña es tan famoso como Bebeto, aunque prefiere la música de discoteca al fútbol. Se inspira en Elvis Presley y en el melódico Tom Jones, si bien su histriónico estilo impide cualquier comparación. Ahora, gracias a la televisión, tiene la agenda cargada de galas.Pregunta: ¿Cómo llegó usted a El Semáforo?

Respuesta: Me llamó un representante y me aconsejó que fuera. Allí me trataron de maravilla, aunque el público no entendió mi actuación porque canté en inglés.

P. ¿Ha tenido otras ofertas en estos meses?

R. Me llamaron de otras televisiones, entre ellas Tele 5, pero tengo un contrato de exclusividad con Chicho Ibáñez Serrador. Y una cadena de televisión de Lisboa, otra de Buenos Aires y la RTL alemana se han interesado por mí.

P. ¿Hasta dónde llega su compromiso con Ibáñez Serrador?

R. El contrato es hasta el 31 de diciembre, aunque se puede prorrogar otro año y medio.

P. ¿Qué opina de los programas en los que los cantantes aficionados desplazan a los consagrados?

R. A mí me ha ido bien.

P. ¿Entiende el público su estilo?

R. Sólo cuando canto en español. Las versiones en japonés o en chino no las comprenden bien, aunque hay imitadores que ya han empezado a copiar mi estilo.