González se toma dos días de descanso en el campo

La primera consecuencia de las elecciones del pasado domingo es que los socialistas han cedido el protagonismo de la vida política a todos los demás. Mientras Rodrigo Rato, uno de los vicesecretarios generales del PP, se reúne con dirigentes de todos los grupos parlamentarios, los socialistas se han retirado de escena. El presidente del Gobierno en funciones, Felipe González, pasará 48 horas fuera de Madrid descansando y volverá el viernes para la reunión del Consejo de Ministros.Los dirigentes del PSOE recuerdan sus penalidades tras las elecciones del 6 de junio de 1993 cuando, al perder la mayoría -con sólo dos diputados más de los que ahora ha obtenido el PP- tuvieron que emprender negociaciones inmediatas con CiU y con el PNV con la crítica permanente de los populares. Ahora ven con alivio que la historia no se repite.

Tan sólo Joaquín Almunia, hasta, ahora presidente del grupo parlamentario socialista y futuro portavoz del mismo grupo, mantendrá reuniones en los próximos días con el propio Rato, con el portavoz de CiU, Joaquim Molins, y con los representantes del PNV y Coalición Canaria.

Los contactos van a ser discretos. De momento el PSOE sólo tiene que hablar de las Mesas del Congreso y del Senado y de las presidencias de las comisiones.