"Ya no se ven gatos en las calles, por la ausencia de ratas"

Está a la cabeza, en espera de convocar elecciones, de un club con marcada vocación localista; el mismo logotipo, a punto de cumplir una década al igual que la propia organización, no puede ser más evidente: dos gatos tiran del carro de la diosa Cibeles. Resulta desmitificadora y nunca mejor dicho, la imagen de uno e los animales domésticos por antonomasia sustituyendo a dos leones y, sin embargo, a Sergio Asensio le parece una representación simpática, un "acierto" de sus predecesores en el club que nunca debería modificarse.Pregunta. Se piensa más en el perro como animal de compañía.

Respuesta. Es más por una cuestión de tradición. La frase hecha de que el perro es el mejor amigo del hombre ha contribuido a mantener esa tradición; sin embargo, la afición a los gatos está aumentando considerablemente en Madrid.

P. ¿Cómo detecta ese crecimiento?

R. Por varios factores, uno es el incremento de socios en el club, desde que se creó la junta gestora que presido, hace un año, hasta la fecha hemos pasado de 90 a 500 socios.

P. Dado el problema de las cacas perrunas en Madrid, no sería mala idea que el Ayuntamiento fomentara la alternativa del gato.

R. El gato acabará desbancando al perro porque no sólo es más limpio en las casas y en la ciudad, sino que resulta más cómodo para sus dueños.

P. Esa premonición ¿está basada en algún dato?

R. En el espectacular aumento en la solicitud de tramitaciones de certificados de pedigrí. Tenga en cuenta que esa es la función del club, inscribir a los gatos nacidos en las dos crías anuales que se autorizan y controlar sus ascendentes hasta cinco generaciones; si cumplen ese requisito de pureza de raza, la Asociación Felina Española les concede el certificado.

P. El certificado, ¿para qué sirve?

R. Para ganar premios en las exposiciones, o para ser vendidos a precios que oscilan entre las 100.000 y las 25.000 pesetas.

P. Esa es la vida del gato fino, el "aristogato", según expresión Disney, pero ¿qué pasa con el gato de arraba"?

R. Prácticamente ya no hay gatos callejeros en Madrid, fundamentalmente porque ya. no se ven ratas. La química de los raticidas ha sustituido al gato.

P. Sin embargo, durante mucho tiempo formaron parte del paisaje.

R. Sí, no sólo se les podía ver por los tejados sino que se les oía en las épocas del celo. Hoy la imagen es la de algunos gatos que quedan en las calles y que son alimentados por los vecinos.

Club Felino Madrileño. Inforación en el teléfono 4132359.