Belloch niega que el Gobierno intente ilegalizar a Herri Batasuna

El ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, puntualizó ayer que el Gobierno no se ha planteado la ilegalización de Herri Batasuna por el vídeo de ETA que envió a TVE para su difusión, sino que ha instado al fiscal para que analice si existen elementos que puedan ser considerados delictivos y poder imputarlos a personas concretas de la dirección de HB. Belloch contradecía así las afirmaciones que hizo el viernes pasado el portavoz del Ejecutivo, Alfredo Pérez Rubalcaba, según el cual se había encontrado "la pieza criminal" que faltaba para relacionar directamente a HB con ETA y que podría haber "dos delitos que conducirían a la ilegalización de HB".

Belloch explicó su postura en un encuentro con miembros de la Asociación de Periodistas Parlamentarios y en declaraciones posteriores, tras firmar un acuerdo con el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, sobre reparación de daños causados por actos terroristas.

Debate mal enfocado

El ministro, en un intento de no contradecir abiertamente a su compañero de Gabinete, dijo que el debate abierto sobre la ilegalización de HB "quizá está mal enfocado", ya que lo que el Gobierno ha pedido al fiscal es que analice si hay elementos para actuar contra los miembros de la dirección de HB por supuestos delitos de apología del terrorismo, colaboración con banda armada y asociación ilícita.De esos delitos responderían, en principio, todos los miembros de la Mesa Nacional de HB, sin perjuicio de que los jueces llegasen a determinar qué personas concretas serían imputadas.

El ministro recordó que la vía de la ilegalización de HB ya se intentó cuando la coalición presentó sus estatutos, y los tribunales rechazaron la iniciativa del Gobierno. Además, Belloch entiende que una actuación contra HB como grupo político sólo tendría sentido en el marco de la Mesa de Ajuria Enea y con el respaldo de todos los partidos firmantes.

Para el ministro, "en política antiterrorista las medidas son correctas o no en la medida en que son unitarias. En principio puede pensarse que una medida es buena, pero si suscita división ya no lo es tanto".

En cuanto al pago de cien millones de pesetas por parte de la familia de José María Aldaya para su liberación, Belloch no quiso pronunciarse, y aseguró que en estos asuntos siempre hay "un margen enorme de especulación. Posteriormente, tras su firma con el alcalde madrileño, dijo: "Ni lo confirmo ni lo desmiento".