Una siesta polémica

La tarde del viernes se produjo el segundo conflicto grave de los Campeonatos tras el accidente el miércoles de la rusa Tatiana Lebedeva. Entonces, el juez de la Federación Internacional de Esquí (FIS) contra quien chocó se llevó toda la culpa. El nuevo incidente sí le ha tocado de lleno a la organización por el aplazamiento a ayer mismo, antes de la carrera del entrenamiento del descenso masculino. No se pudo celebrar el viernes porque no dio tiempo a preparar la pista. Los jueces de la FIS acusaron a la organización de que los que debían arreglarla se fueron a dormir la siesta. Después de empezar a trabajar a las cinco de la mañana, incluso parece normal. El problema, que ya sabía de sobra la FIS, es que en Sierra Nevada sólo hay una pista y ha sacado la conclusión de que en los próximos Mundiales exigirá dos como mínimo (para hombres y mujeres).Los equipos aceptaron la decisión de la FIS de disputar el entrenamiento y el descenso masculinos el mismo día, pero no por unanimidad. El director técnico suizo Theo Nadig dijo que era antideportivo y el francés Michel Vion que la prueba iba a ser injusta, además de mencionar que el director de carrera, también de la FIS, no tuvo "la calma suficiente con el personal de la pista". ¿En qué quedamos? ¿No estaba dormido?