135 casas en ruina, en la lista municipal de compras

La concejalía de Urbanismo tiene ya una lista de 135 inmuebles en ruina sobre los que ha establecido el derecho preferente de compra por parte del Ayuntamiento en caso de que los propietarios pretendan venderlos. Entre los inmuebles que el edil responsable, Ignacio del Río, ha incluido en la relación se encuentra el teatro Martín (en la calle de Santa Brígida, 3), un edificio de uso dotacional a cuyos propietarios, Pamonsa, no se otorgó la declaración de ruina en la comisión correspondiente celebrada en diciembre. El teatro Martín lleva cerrado más de seis años.

La techumbre del teatro se derrumbó en mayo de 1994. Había sido levantado como café en 1870 y se reformó para albergar un escenario en 1919, bajo la dirección del arquitecto Teodoro Anasagasti. Los propietarios del inmueble quisieron que el Ayuntamiento recalificase el solar para levantar en él 27 apartamentos de lujo. Los responsables municipales de Urbanismo no aceptaron la pretensión de los dueños y en el nuevo plan general sigue apareciendo como un bien dotacional que no se puede destinar a otro uso que no sea el cultural.Otra de las casas incluidas en la lista de edificios sobre los que el Ayuntamiento pretende ejercer el derecho de tanteo y retracto es la casa de Iván de Vargas (el patrón de san Isidro), en la calle del Doctor Letamendi, 1, donde vivió el santo labrador. Ese edificio fue parcialmente demolido hace un año por sus propietarios, a pesar de que está declarado monumento histórico-artístico.

El Ayuntamiento ya había intentado adquirir el caserón (levantado en el siglo XVI sobre la que fue residencia de san Isidro en 1988 para instalar allí la sede del área de Servicios Sociales y un centro de documentación sobre drogadicción.

Las arcas municipales tenían 115 millones consignados para comprar el edificio y otros 215 para su rehabilitación. Pero el pleno municipal del 6 de mayo de 1988 rechazó la compra -paradojas del destino- por los votos en contra de los concejales del CDS y de Alianza Popular, que preferían destinar el dinero a la asistencia social.