Aznar dice que no tiene interés en reabrir la investigacion política sobre el 'caso GAL'

El presidente del Partido Popular, José María Aznar, no tiene interés en reabrir la investigación política sobre el caso GAL si gana las elecciones. "Es más importante modernizar España", declaró ayer a la SER en la primera entrevista después de su elección en el XII Congreso. Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, salió al paso de las promesas sociales de Aznar en presencia de su homólogo de CC OO, Antonio Gutiérrez, y subrayó que el modelo de sociedad propugnado por los populares es "distinto al de los sindicatos".

En el programa Hoy por hoy, de Iñaki Gabilondo, Aznar insistió en su intención de "pasar cuanto antes la etapa política" actual y manifestó que le parece mucho más urgente ponerse a la tarea de modernizar España que enzarzarse "en la investigación política del caso GAL, aunque admitió que, si alguien hace la propuesta, su partido "lo estudiará". Aznar contestó con aspereza cuando se le preguntó por la solidez de sus convicciones centristas, teniendo en cuenta que en 1978 se afilió a Alianza Popular cuando existía la opción de UCD, y se refirió también en tono despectivo a los recelos manifestados por partidos nacionalistas como CiU y el PNV sobre las intenciones autonómicas de los populares. Dijo que no quiere entrar en ese tipo de polémicas y calificó a los nacionalistas de fuerzas políticas minoritarias. "Ya se sabe", indicó, "que cada fin de semana toca un exabrupto".El proyecto de reducir el número de ministerios se limita a uno, según dio a entender, porque ahora existen 15. A Aznar 14 le parece un número apropiado. El departamento que desaparecería es Cultura porque el PP no tiene ningún interés dirigista sobre la creación artística, según su presidente.

Tampoco rompió su mutismo absoluto sobre la composión de un Gobierno presidido por él, aunque vaticinó que habrá mujeres y, quizá, "grandes sorpresas" y negó que exista ningún compromiso con nadie, ni siquiera con el secretario general del partido, Francisco Álvarez Cascos, ante el que Aznar prometió en un mitin multitudinario en Oviedo, en la campaña electoral del año pasado, que estaría en su Gabinete.

En el capítulo de desmentidos sobre supuestas intenciones de recortes sociales, el presidente del PP negó que vaya a abaratar el despido como contrapartida a un aumento de la estabilidad de los contratos laborales, dentro del pacto por el empleo que se ha comprometido a negociar con sidicatos y organizaciones empresariales.

Recelo ugetista

Por su parte, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, declaró en Cantabria que del programa del PP sólo conoce ciertas generalidades. "Pero", matizó, "la política fiscal que propugna nos preocupa porque consideramos que configura un modelo de sociedad distinto del que defendemos los sindicatos". El líder sindical añadió que no le gustaría tener que recordar algún día a Aznar sus palabras de que no desea ningún voto conseguido con engaño o disimulo. El PNV, a su vez, acusó a Aznar de iniciar la campaña con insultos por considerar cosas "propias de mentecatos" las críticas de los peneuvistas al coste económico de la organización del Congreso.