Vallecana indignada

Soy una vecina del barrio de Vallecas que me siento muy indignada. Por si no tuviéramos ya su ficiente con tener que tragar con los malos humos de la incineradora de Valdemingómez, encima a los vallecanos-as se nos niega el acceso a las sesiones públicas de la junta municipal de nuestro distrito. Perdón, quiero rectíficar, a los vallecanos-as que estamos en contra de la incineradora y que, además, no militamos en su partido (el Partido Popular, que por lo visto lo de popular parece que lo practiquen poco), pues ellos-as fueron los únicos que pudidieron acceder a la sala de sesiones. A los demás ciudadanos-as, iguales que ellos-as según nuestra Constitución (la de todos-as), se nos cerraron las puertas, que, además, estaban custodiadas por nuestras fuerzas de seguridad, las mismas que están para defendernos a los ciudádanos-as de individuos-as como los que se encontraban dentro de la sala, que con actitudes como ésta hacen peligrar nuestra democracia.Por favor, ¿dónde vamos a llegar? Si se nos prohíbe ahora la asistencia a plenos y consejos de participación ciudadana, ¿qué ocurriría si, como vaticinan las encuestas, estos señores-as tan antidemocráticos-as se constituyesen como gobernantes-as de éste nuestro país?.-