No es una mofeta
Me dirijo a usted con el fin de. que su prestigioso periódico no siga incurriendo en el mismo error que observé recientemente en el pie de una fotografía que hacía referencia al pregón navideño del Ayuntamiento de Madrid, y que el día 28 de diciembre (llegando a dudar si se trataba de una inocentada) volví a ver' como gran titular de un artículo y como base de dicho artículo.Dicho error consistía en denominar al personaje de Disney Timón como "mofeta cuyo mal olor había lavado la Disney", cuando en realidad dicho personaje es un suricato, un animal diferente y de apariencia totalmente distinta.
Escribo en nombre de varias personas, lectoras de EL PAÍS desde hace mucho tiempo, que pensamos que el ignorante autor de dicho artículo debería informarse mejor acerca de lo que va a escribir, antes de criticar o, mejor dicho, "poner verde" a al guien o a algo. Es increíble que, con las cosas que pasan en nuestro país y en el resto del mundo, alguien se dedique a criticar a la compañía Disney, honrado negocio que. se dedica a entretener a grandes y pequeños de todo el mundo.
También nos gustaría pedir que tuviera un poco más de respeto a las personas que, como a nosotros, les gustan la naturaleza y los animales, y que con la mente abierta vemos más allá del marketing, y, sin ninguna intención política disfrutamos de las películas de animación Disney, que son mucho más que publicidad y política. Simplemente nos gustan y nos es igual que alguien después juegue a disfrazarse de sus personajes. .
¡Ojalá pusieran una estatua, de Pocahontas (personaje histórico) en el parque del Retiro en vez de que Í en periódicos de prestigio con una digna plantilla escribiesen monigotes de came y hueso! Sé que seguramente esta carta no será publicada, pero pediría por favor que fuesen honra dos y admitiesen su error: un suricato no es una mofeta.-
