En proceso de atasco

El hecho de que se entregara de forma voluntaria uno de los acusados del crimen de Costa Polvoranca el pasado 14 de diciembre, Antonio Cuenca Sastre, de 19 años, no ha hecho avanzar la instrucción del caso, contra lo que esperaban las partes personadas en el proceso. Esto ha motivado que algunos abogados de la defensa hayan pedido nuevas diligencias para aclarar quién fue el autor material de la puñalada que costó la vida al vecino de Álcorcón (144.850 habitantes) Ricardo Rodríguez, de 20 años, el pasado 21 de mayo, en la zona de copas Costa Polvoranca.Las pruebas consisten en que la policía aporte su libro de registro interno y una copia del programa de Antena 3 Se busca. Con el libro de registro pretenden averiguar si los datos aportados por los policías en sus declaraciones judiciales coinciden con las horas en que realmente se produjeron los hechos. Los abogados defensores sospechan que la policía se personó en el lugar del suceso más tarde de lo que tienen declarado sus agentes. Y que eso provocó que no obtuviera, todos los testimonios posibles y que los que sí logró estuvieran deformados.

Análisis de la voz

Respecto al programa de Antena 3, en él supuestamente se identificó una persona, en una llamada telefónica, como Toño (Antonio Cuenca Sastre, el acusado que se entregó voluntariamente). Sin embargo, éste ha negado en su declaración ante la juez de instrucción número 3, Caridad Hernández Garcia, que fuera él quien llamó a la televisión. Por tanto, los abogados solicitan que se examine el vídeo del programa para cotejar la voz anónima con la de Toño. Las defensas también esperan que se produzca un careo entre todos los imputados y el nuevo acusado de participar en la reyerta en la que murió Ricardo Rodríguez.Carlos Cuenca Perona, abogado de Antonio Cuenca, Toño (pese a la coincidencia del apellido, no son familiares), sostiene que su defendido no tiene nada que ver con el crimen de Costa Polvoranca. "Él estuvo allí, pero ni siquiera vio la pelea. La descripción física no se corresponde con él", comenta el letrado.

El testimonio de Antonio Cuenca, conocido por Toño en el proceso, ha defraudado a los abogados. El único detenido que permanece en prisión, José Cristóbal Castejón, El Mallorquín, de 21 años, fue quien le reconoció como una de las piezas clave del caso. Toño fue quien presuntamente vio caer a Ricardo Rodríguez tras ser apuñalado, por lo que debió de observar quién le apuñaló. Hasta aquí las declaraciones apuntaban a dos inculpados: al ya citado El Mallorquín o al portero del pub Donqui, enfrente del cual murió Rodríguez, David García. Precisamente ambos se acusan entre sí, si bien el juez mantiene en prisión sólo a El Mallorquín.

Cabezas rapadas

La madrugada del 21 de mayo tiñó por primera vez de sangre el polígono de copas Costa Polvoranca. Un grupo de cabezas rapadas, cuyo número aumenta según avanza la instrucción del crimen, golpeó y apuñaló a Ricardo Rodríguez, que se hallaba con otros amigos suyos en el bar La Puta Calle, frecuentado por punkis. Colindante con éste se ubica El Donqui. Aquí se congregaban rapados y neonazis.La versión dada por la policía desde el primer momento señalaba que se, trató de una lucha entre tribus urbanas. Los amigos del agredido y los tres heridos testificaron en las horas siguientes que les "habían mirado mal". Los agresores esgrimieron que a ellos les rociaron la cara con un pulverizador de autodefensa.

En cualquier caso, Ricardo Rodríguez García sufrió numerosos golpes y patadas que le marcaron todo el cuerpo. Y una única puñalada de unos dos centímetros de largo por uno de ancho le partió el esternón y le seccionó el corazón. De los otros tres heridos, Raúl Tomillo, de 19 años, sufrió una puñalada en la pierna. El resto, golpes y hematomas.

Tan sólo tres días después del crimen, fue detenido El Mallorquín en una pensión del distrito Centro. Según la policía, pertenecía al grupo ultraderechista Bases Autónomas. El 25 de mayo son Félix Francisco Chaves y Antonio Bronchalo, Tato, ambos de 1-8 años, los que ingresan en prisión. El que estuvo una noche en los calabozos fue el, portero de El Donqui, David García Gómez, quien fue puesto en libertad el 30 de mayo. Después se entregó de forma voluntaria Alberto Villar Benito, El Chema, catalogado por la policía como muy, violento.

El caso quedó en vía muerta hasta el 2,4 de julio. Fue en esa fecha cuándo El Mallorquín acusó a David García de ser el autor de la puñalada que mató a Ricardo. Tres días más tarde se produjo un careo en el juzgado. Los dos sospechosos, El Mallorquín y David García, se acusaron mutuamente. A partir de ahí, las diversas declaraciones de testigos y acusados se han dividido a favor o en contra de estos dos principales sospechosos.

En la actualidad, son ya siete los,inculpados por el caso. A los ya nombrados hay que añadir a A. M., de 17 años, acusado de encubrir el arma homicida. "Hubo mucha gente que participó en la reyerta y poco a poco van a tener que ir saliendo, comentó un letrado. "Sólo cabe esperar que sea pronto".