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Entrevista:LUZ DE GAS

"Me gustaría que me abanicara una reina"

De bruces ante la chispera calle Mayor, justo frente al naufragio nocturno de todas las antesalas del sexto mandamiento de la ley de Dios Nuestro Señor de la calle del Arenal, chuleando la boca del metro a sus pies, las 24 horas del día vendiendo periódicos sin respiro en la Puerta del Sol, los cinco se reparten el tajo, las perras, la gloria de ser únicos. Esta víspera de Reyes, Carlos hace la función de noche. Uno se acurruca en el interior del quiosco, pregunta, anota y manipula la grabadora. Basilia le deja su puesto a Carlos.Pregunta. Basilia, ¿cuántos periódicos lee?

Respuesta. Ninguno, ya sabe eso de, "en casa del herrero, cuchillo de palo".

P. ¿Y usted, Carlos?

R. Los ojeo todos.

P. Mañana, día de los Reyes, ¿cómo titularía el periódico en primera página.

R. Alegría para casi todos.

P. ¿Lee más en los periódicos o en los ojos de los gatos?

R. Los felinos me ponen nervioso.

[Un cliente pide. La señora gorda de la boca del metro se desternilla: "El premio del Niño Para mañana, ¡el premio!"].

P. Carlos, ¿qué es la derecha?

R. Nada.

P. ¿Qué es la izquierda?

R. Lo que ya pasó.

P. ¿El comunismo le dice?

R. No creo en eso.

P. ¿Y el fascismo?

R. Existe, hay que erradicarlo.

P. ¿Qué es el centro?

R. Donde yo trabajo, en Madrid.

P. ¿Y el centro-derecha?

R. Me repito.

P. ¿Y qué es izqui ... ?

R. Por favor, ya está bien de que un país no sea más que de derechas, izquierdas y demás; eso es lo único que digo.[Veinte veces, 20 personas han interrumpido a Carlos: "¿Me da Abc y EL PAÍS?"].

P. ¿Le huele a diablo en el mundo?

["¡Lotería, para mañana sale!". Los loteros aguantan la lluvia, se desgañitan, Dios los ampara. Un cliente del quiosco Sol: "Dos de El Mundo y un Abc". Carlos vende y cobra].

P. ¿Daría 10 millones de pesetas para que no le cortaran un dedo meñique?

R. No.

P. ¿Qué hay que hacer con lady Di y con "la otra"?

R. Que hagan su vida.

P. ¿Es capaz de piropear a la Puerta del Sol?

R. Es un sitio ejemplar.

R. Es un sitio de reunión de millones de vidas.

R. Tiene la cara bonita porque le da el sol todo el día.

[Me acurruco más en mi esquina quiosquera para que Javier Gurruchaga no me vea. Viene a dedicarle su disco a Carlos. De entrada se equivoca y escribe: "A Juan Carlos García". Carlos le recuerda que sobra lo de Juan y Gurruchaga repentiza y reescribe: "Al gran Carlos"].

R. La vida ha cambiado: hay inseguridad ciudadana, y la tele, la radio...

P. ¿Le gustaría ser propietario de un saco de fondos reservados en un desierto?[Ahora llega a comprar la prensa Rosana Torres, mi compañera, y no me da tiempo a esconderme. Y hablamos y nos piropeamos, y Carlos dijo que la conocía por clienta].

P. Antes los periódicos servían para envolver, ahora?

R. Para reciclarlos

P. ¿Qué le parece ¡Hola!?

R. ¡Qué me va a parecer: el número uno del corazón.

P. ¿Dónde llegaremos con Banderas y Melanie?

R. A este paso, hasta en la sopa quedarán cortos.

P. ¿Qué le choca más de su clientela puertasolera?

R. Que viene uno y pregunta: ¿Cuánta prensa ha salido?" Y le dices cuatro, y te pide el que no ha salido.

P. ¿Si Aznar y González se pegan un tiro mortal el mismo día de las próximas elecciones, ¿se harían ricos los cinco vendiendo periódicos?

R. Venderíamos champaña.

P. ¿Qué es el periodismo?

R. Es lo más bonito si fuera limpio.

[Llega una pareja y él pregunta: "¿Qué ha llegado?". Carlos: "Todo". Y se van].P. ¿Le gustaría ser el abanico de una reina?

R. Me gustaría que me abanicara una reina.

R. Todos nos consideramos periodistas, pues trabajamos en el país y vendemos periódicos.

[Carlos ya ha hecho la noche, me pide una firmita" para el libro de oro del quiosco Sol. Y uno descubre lo que un día anotó Karlos Arguiñano: "Al quiosco Sol, con dos cojones y mucho perejil. ¡Aúpa la Real!". A Carlos lo reemplaza Juan].

P. ¿Qué es el quiosco Sol, Juan?

R. Lo que no hay.

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