_
_
_
_

Miles de vascos exigen el fin del cautiverio

Pedro Gorospe

, Más de 20.000 personas intentaron ayer con su solidaridad llenar el vacío que ETA ha dejado desde hace siete meses en la familia Aldaya. La manifestación se convirtió en un silencioso "grito de libertad" a favor del industrial secuestrado, y de apoyo a todas las víctimas de los recientes atentados de León, Vallecas, Valencia e Itsasondo.

La convocatoria pacifista hizo posible en San Sebastián que los partidos del pacto de Ajuria Enea compartieran un espacio común como la calle, algo difícil de conseguir formalmente en torno a la mesa por la paz.

El lehendakari José Antonio Ardanza pidió a todos los españoles que crean con convicción que los vascos detestan la violencia.

Entre los manifestantes se encontraba una amplia representación de todos los partidos políticos, instituciones, asociaciones, y del mundo cultural y judiciaL La marcha recorrió durante 50 minutos las calles que separan la Paloma de la Paz, en Anoeta, de los jardines de Alderdi Eder, frente al Ayuntamiento.

Más información
La prolongación del secuestro, un desafío a la policía
La familia Aldaya ha enviado dinero a ETA, según afirman fuentes de la investigación

En ese punto se unieron a la concentración de los trabajadores de Alditrans, que contó con la presencia de los hijos del industrial secuestrado. Miembros de cada una de las dos asociaciones pacifistas convocantes Gesto por la Paz y Denon Artean, leyeron un comunicado y luego homenajearon al propio Aldaya y a las víctimas de la violencia terrorista con un minuto de silencio, seguido de una cerrada ovación.

"La mayoría de los ciudadanos", afirma el comunicado, "más allá de nuestras diferencias deseamos vivir en el respeto a unas reglas mínimas de convivencia que pasan, inexcusablemente, por el respeto a la vida como derecho fundamental".

Durante el recorrido se distribuyeron 20.000 postales con motivos navideños, con el fin de que sean devueltas a las organizaciones convocantes con mensajes de apoyo a Aldaya.

Una veintena de personas, entre ellos varios trabajadores de Alditrans y miembros de la asociación pacifista Denon Artean-Paz y Reconciliación, se encerrarán y ayunarán esta Nochebuena como muestra de solidaridad con Aldaya y las familias de las víctimas de la violencia de ETA. Al encierro, que se iniciará a las nueve de la noche de hoy en el albergue municipal donostiarra de La Sirena, se sumará el alcalde de San Sebastián, Odón Elorza.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Pedro Gorospe
Corresponsal en el País Vasco cubre la actualidad política, social y económica. Licenciado en Ciencias de la Información por la UPV-EHU, perteneció a las redacciones de la nueva Gaceta del Norte, Deia, Gaur Express y como productor la televisión pública vasca EITB antes de llegar a EL PAÍS. Es autor del libro El inconformismo de Koldo Saratxaga.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_