¿Fondos de cohesión en el fútbol?

, Jean-Louis Dupont es el hombre en la sombra del caso Bosman. Es el abogado que ha llevado el asunto. Este joven que aún no ha cumplido los 30 ha estudiado miles de folios sobre legislación deportiva y sobre financiación de las competiciones. Dupont aboga por introducir en Europa mecanismos financieros semejantes al del deporte en Estados Unidos. El fútbol tendrá que aprender a repartir el dinero que genera. Dupont habla de fondos de cohesión.

La decisión del alto tribunal significa que aumentarán las ofertas de trabajo para los futbolistas comunitarios, aunque a costa de mayor movilidad geográfica. Los futbolistas medianos temen que sus sueldos se vean perjudicados por la competencia de otros jugadores extranjeros, pero también ellos dispondrán de mayor número de ofertas y, sobre todo, podrán ir favorablemente en repercutir sus sueldos el dinero que los clubes se ahorran al no pagar traspasos. Para los futbolistas de élite, todo son ventajas. El presidente del Newcastle, Sir John Hall, un multimillonario apasionado por el fútbol, ya ha calculado que los pagos medios por salarios se incrementarán un 20% en Inglaterra, pero sabe también que ese dinero lo recuperará con lo que se ahorrará al dejar de pagar traspasos. De ser cierta esa cuenta, está claro que los primeros beneficiados por la sentencia serían los jugadores.

Eso es precisamente lo que da más valor a la sentencia: obliga al fútbol a replantearse sus estructuras económicas. Jean-Louis Dupont advierte que eso ya se está produciendo desde hace unos años. La Liga de Campeones es el mejor ejemplo.- los derechos de televisión y de imagen los contrata directamente la UEFA y los reparte entre todos los participantes con un efecto corrector que permite que cobre más el equipo que más puntos obtiene en la liguilla. En España funciona un sistema similar: los derechos de televisión los negocian los clubes globalmente y se reparten de acuerdo con un baremo que beneficia más a los equipos con más atractivo para el público.

"Los políticos deberían aprovechar el caso Bosman como un libro abierto para enseñar integración europea. La gente lo entendería mucho mejor que el euro, los pecos, o los criterios de convergencia de Maastricht", dice Dupont.

Según Dupont,es el momento de estudiar fórmulas económicas para financiar el fútbol. Profundizar en las de los derechos de televisión y de imagen, pero también crear otras nuevas, quizá un impuesto sobre los grandes clubes para financiar a los pequeños, crear una especie de fondo de cohesión, o repartir también una parte de los taquillajes. "En Alemania se acaba de aprobar una norma que prevé el reparto entre todos los clubes de parte de los ingresos por taquillaje", dice.

"Se trata de buscar fórmulas como las que se aplican en Estados Unidos, donde los jueces sostienen que en el deporte lo importante es buscar el equilibrio en la competición porqué eso aumenta la incertidumbre sobre el resultado y atrae a más público. Los equipos deberían tener claro que sus ingresos mejoran cuando hay igualdad en la competición. Y que lo que pierden por un sitio lo recuperan por otro. Lo que no puede haber es un reparto absolutamente igualitario. Tiene que haber un incentivo que premie al que lo haga mejor. La igualdad absoluta es el empate, y ese es el peor resultado posible en el fútbol. El sistema americano evita las diferencias estructurales y favorece las diferencias coyunturales", remacha Dupont.