La emisión del vídeo del asesinato de Rabin cuestiona la eficacia de la policía
La difusión de un vídeo que muestra a un hombre disparando contra el primer ministro Isaac Rabin la fatídica noche del 4 de noviembre reabrió ayer el furioso debate sobre la eficacia de los servicios de seguridad y levantó protestas contra "la comercialización" del magnicidio.Las imágenes borrosas transmitidas por el Canal 2 de la televisión israelí, que compró el vídeo a un aficionado por 350.000 dólares (unos 43 millones de pesetas), presentan los últimos instantes de Rabin cuando se disponía a abordar su coche tras una multitudinaria manifestación pacifista en Tel Aviv. Las imágenes muestran a un hombre que se infiltró dentro del "área segura", esperó a que Rabin pasara por delante, apuntó el arma y disparó tres veces.
La emisión de esas escenas se produjo horas después de que un juzgado de Tel Aviv aplazara hasta el 23 de enero el juicio contra el judío Yigal Amir, el asesino confeso arrestado instantes después del atentado. Amir, de 25 años, aparentaba tranqulidad y hasta sonrió una vez cuando compareció ante los magistrados, pero se abstuvo de hablar con los periodistas. El impacto del vídeo ha sido colosal, pues recrea uno de los momentos más traumáticos de la historia del joven Estado israelí.
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