RAYANDO LA PERFECCIÓN

Perfección. Ésa fue la palabra más escuchada por Ana Belén durante la ceremonia de entrega de la Medalla de Oro que la Academia de Cine concedió a la actriz española, que cumple 30 años en la profesión. Cariñosos halagos, sinceras declaraciones de amor y piropos, muchos piropos escuchó la actriz y cantante, primera mujer que recibe la medalla de la Academia de Cine, de boca de sus amigos que acudieron en masa a homenajearla al hotel Ritz de Madrid en la noche del lunes, en una ceremonia presidida por el presidente de la Academia, José Luis Borau; la ministra de Cultura, Carmen Alborch; el cineasta Luis Garcia Berlanga, y Jordi Garcia Candau, director de RTVE. Ana Belén se había tomado una pastilla para relajarse y lo consiguió a base de tabaco, algo insólito en ella. La emoción la llevaba por dentro, al contrario que su marido, Víctor Manuel, que a duras penas contuvo las lágrimas. No fue para menos. El mundo de la profesión se volcó en la ceremonia, que fue presentada por Miguel Bosé. Paco Rabal, que le brindó unos versos iniciados por esta frase del Tenorio: "No estoy soñando quizás / con las sombras de un edén"; Imanol Arias -"nada sabe tan dulce como tu boca"-, Carmen Maura, Loles León, María Barranco y Concha Velasco -"te has ido agrandando en mi corazón como persona y en mi cerebro como actriz"- fueron los actores que hablaron en público sobre la actriz. El mundo de la canción es tuvo representado nada más y nada menos que por Joan Manuel Serrat -"te agradezco por encima de todo tu afecto"-, Miguel Ríos, Rosa León y Joaquín Sabina. Entre los directores de cine presentes estuvieron Gutiérrez Aragón, Jaime de Armiñán, Rosa Vergés, Fernando Colomo, Imanol Uribe y Manuel Gómez Pereira, entre otros. Fueron las palabras de la directora Pilar Miró las que cosecharon mayor número de aplausos. Graciosa y muy emotiva, Miró recordó los inicios con Víctor Manuel y Ana Belén, "con los que hicimos en los años setenta la novela más larga y bonita". El mundo del teatro no faltó a la cita: José Carlos Plaza, Miguel Narros y otros. También su diseñador favorito, Jesús del Pozo, de quien Ana Belén lucía un modelo precioso con chaquetón y zapatos a juego, ocupó sitio en la mesa de los más allegados, entre los que se sentó Víctor Manuel, quien había rechazado su presencia en la mesa presidencial. Ana Belén, que prepara un nuevo disco con la presencia de Antonio Banderas, Chavela Vargas, Juan Luis Guerra y otros, quiso hacer partícipe de su medalla a toda la profesión y a la industria cinematográfica.-