"Bergamín ha sido uno de los madrileños mas universales del siglo"

Carlos Gurméndez Vitorica (Madrid, 1919) es hoy uno de los pensadores españoles de mayor estatura filosófica. Alumno de los jesuitas de Areneros, estudiante de Filosofía y Derecho en Berlín, París y en San Bernardo, ha sido amigo y discipulo de Jean-Paul Sartre, de Manuel,García Moirente y de las mejores cabezas pensantes de la Europa de nuestro siglo. La obra filosófica de Gurméndez se verá acrecentada en las proximas semanas con un nuevo libro, Ontología de la pasión. Pero hoy el pensador madrileño evoca señaladamente a quien fuera su maestro y amigo, el intelectual madrileño José Bergamín, cuyo centenarío se celebra este mes con actos por todo el territorio español, Madrid incluido. Carlos Gurméndez ha disertado recientemente en Galicia y también en Madrid sobre la persona y la obra del existencialista y dialéctico católico, de quien conserva muy fresco el recuerdo de su amistad.Pregunta. ¿Cómo se conocieron?

Respuesta. Nos presentó mi amigo José Gallego Díaz, gran matemático, en la calle del General Mítre, donde se encontraba la redacción de Cruz y Raya, la revista fue fundada. y dirigida por él, aunque me dijo que la idea de la publicación había surgido del músico Manuel de Falla.

P. ¿Qué le llamo más la atención?

R. Me impresionó mucho su ironía. Me sacaba unos treinta años. Era madrileño, de familila malagueña y origen italiano, de Bérgamo. Por ello, él se definía como, bergamasco.

P. ¿Cómo eran sus vínculos con Madrid?

R. Muy estrechos. Él escribió una obra estupenda sobre nuestra ciudad. Se titula Los tejados de Madrid o el amor anduvo a gatas. Fue representada en París en 1969. Se trataba, según me dijo, de un homenaje a Lope de Vega inspirado en su Gatomaquia. Es un libro donde esboza una teoría sobre el amor en ella escribe que los madrileños viven el amor por encima de los tejados -vistas las prohibiciones de cariz eclasiástico entonces vigentes-; este amor es vivido de forma discreta y silenciosa; rasgos principales, a su juicio, de la personalidad madrileña.

P. ¿Qué era lo más destacado de la personalidad de Bergamín?

R. Su inteligencia crítica, su riqueza emotiva, su sentido de la amistad y de la comunicación. Su asombrosa cultura. Conocía. al dedillo a nuestros clásicos del Siglo de Oro.

P. ¿Qué papel desempeñaba el pueblo en el pensamiento de Bergamín?

R .El pueblo era para él la voz de Dios. "Donde no hay pueblo, hay ignorancia", decía siempre.

P. ¿Cómo definiría a José Bergamín en su relación con la ciudad de Madrid?

R. Creo que ha sido el más universal de los madrileños de nuestro siglo.