El coste para España de la operación en Bosnia se dispara hasta 25.000 millones

El Ministerio de Defensa ha tenido que revisar al alza el coste de la contribución española a la fuerza de paz de la OTAN encargada de vigilar el cumplimiento del acuerdo firmado ayer en París por los presidentes de Bosnia, Croacia y Yugoslavia. Frente a la previsión inicial de 19.000 millones de pesetas anuales, la estimación actual se sitúa en 25.000. España no sólo deberá asumir el 30% que hasta ahora devolvía Naciones Unidas, sino también algunos servicios que prestaba gratuitamente la ONU en la antigua Yugoslavia.

Aún falta por evaluar la cuota que corresponderá a España de los gastos comunes (comunicaciones o cuarteles generales) del despliegue aliado, cifrados en unos 800.000 millones de pesetas para el año que debe durar la operación. El Gobierno español confía, sin embargo, en que otros países que no aportan tropas contribuyan a sufragarlos.En cualquier caso, la óperación en Bosnia será no sólo peligrosa, sino también muy cara. España se ha comprometido a mantener durante el año 1996, trasvasándolo a la OTAN, el contingente ofrecido a la ONU, que incluye una Agrupación Táctica del Ejército de Tierra, con 1.250 efectivos; una fuerza aérea integrada por ocho cazas F-18, dos Hércules nodriza KC-130 y un avión de transporte C-212, con una dotación total de 250 militares, y dos fragatas; así como eventualmente un avión P-3 y un buque logístico.

El jefe del Gobierno, Felipe González, anunció el pasado 3 de diciembre, durante su conferencia de prensa conjunta con el presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, la posibilidad de incrementar la contribución española, si fuera necesario.

Defensa ha estudiado un ligero, aumento del contingente terrestre, que pasaría de 1.250 a unos 1.500 soldados, lo que permitiría desdoblar el actual bataIlón español en dos batallones, aunque más reducidos.

La OTAN ha asignado a España el mando de una brigada, con cuartel general en Mostar, pero hasta ahora no se han encontrado los dos batallones que, junto al español, deberían formar dicha brigada. Un eventual desdoblamiento del contingente español solucionaría el problema, al faltar un único batallón suplementario. De momento esta opción ha sido descartada, precisamente por razones económicas.

No obstante, España tendrá que aumentar, como mínimo, en 200 efectivos su destacamento actual en la zona, pues la Agrapación Aragón, que partió a mediados de octubre hacia la antigua Yugoslavia, cuenta sólo con 976 soldados, en lugar de los 1.170 de su antecesora, la Agrupación Galicia. También aumentará la presencia de españoles en cuarteles generales, aunque será compensada con la retirada de los 20 observadores de la ONU.

El ministro de Defensa, Gustavo Suárez Pertierra, iniciará mañana una gira por la región que se prolongará hasta el próximo martes. Suárez Pertierra visitará Medugorje (cuartel general de los cascos azules españoles), Mostar, Sarajevo, Zagreb y la base de Aviano (Italia), donde están desplegados los aviones españoles. Si es posible ajustar las agendas, el ministro español se entrevistará con los presidentes de Bosnia y Croacia, Alia Izetbegovic y Fanjo Tudman, y con los máximos responsables de la operación de la OTAN, el teniente general George Joulwan y el almirante Leighton Smith. En Aviano, coincidirá con una delegación de parlamentarios.

La visita se produce en vísperas de que, probablemente el martes día 19, los soldados españoles cambien la boina azul por el casco de la OTAN.