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Reclusos de Soto salen de la cárcel para jugar a baloncesto

"La idea nos parece estupenda", dice el director del patronato de deportes

Un grupo de reclusos del centro penitenciario Madrid V, situado en ayer en Soto del Real, compartieron ayer balón y cancha de baloncesto con Los Gañanes, un equipo de baloncesto de Colmenar Viejo (27.718 habitantes).El partido se celebró en el Pabellón Municipal Lorenzo Rico, de Colmenar. Los internos, que la semana pasada recibieron en su cancha de la prisión a Los Gañanes, devolvieron ayer la visita. Salieron derrotados (Los Gañanes, 66; Madrid V, 64), pero gozaron de tres horas de libertad terapéutica.

El Ministerio de Justicia quiere que los presos de Soto se integren con el resto de la población a través del deporte. En septiembre contrató a tres monitores para que gestionasen las actividades deportivas. No consiguieron lo que más les habría gustado: poder federar en baloncesto varios equipos. Los plazos y el calendario de la federación, los culpables. "Pero tuvimos entonces la suerte de encontrar una liga dispuesta a ser compartida, la de Colmenar Viejo", subraya un monitor. PASA A LA PÁGINA 24

La cancha de la libertad

VIENE DE LA PAGINA 1 Los monitores de los presos están satisfechos con la inclusión de su equipo en la liga de aficionados al baloncesto de Colmenar Viejo, dependiente del Patronato Deportivo Municipal [PDM]". El director del PDM, Jesús Molina, explicó ayer: "La idea nos pareció estupenda. Sus objetivos coinciden con los de esta liga: hacer llegar el deporte a todos. No se buscan grandes jugadores, ni extraordinarios resultados. Lo importante es jugar, y por eso los equipos se arbitran entre, ellos", afirma Molina.

Las propuestas para que los presos pudiesen participar en esta liga y utilizar las instalaciones deportivas municipales colmenareñas también contaron con el visto bueno del concejal de Deportes, el popular Justo García. "Es lo mínimo que podemos hacer para que aprendamos a verles como personas normales, sin ningún tipo de discriminación", indicó Garcia.

El pasado 26 de noviembre, siete equipos de Colmenar Viejo fueron a jugar a la cancha de la cárcel. A jugadores como los del Juventud les pareció muy bien ir allí. Pero ahora exigen que se es facilite un acceso más rápido a la cárcel. Algunos tardaron tres cuartos de hora para entrar. Un jugador, Marcos Berrocal, pide más, "Si hay, que ir, se va, pero que nos pongan un cuarto con llave para guardar los objetos de valor". Lo afirma casi enfadado, pues durante la visita, dice, le desaparecio un chaleco, que más tarde fue encontrado en un retrete. Otros jugadores, Sergio y Mariano, también alegaron esa misma tarde que les había desaparecido un reloj Rolex y 20.000 pesetas. A Jesús, de 25 años, le pareció muy bien enfrentarse ayer contra el Madrid V, como se llama el equipo de la prisión. "Incluso hemos jugado bastante mejor que otras veces. Es un equipo más y nos viene bien para respetar el juego de los contrarios, algo que estábamos perdiendo por conocernos en Colmenar demasiado", dijo.

O. N. A., de 26 años, , y A. R. S., de 31, dos internos del Madrid V, comentaron satisfechos el encuentro. El primero se confesaba muy deportista desde niño; jugó en los juveniles del Rayo Vallecano, y después, en vanos equipos de Tercera División, en Madrid y en la Comunidad Valenciana. Ayer por la mañana llegó a la prisión después de disfrutar de tres días de permiso. Esperaba impaciente la hora del partido. "Me parece, fenomenal, esta iniciativa. ¡Nos sacan los domingos por la tarde! ¡Esto es mucho mejor que estar allí dentro! Te distraes...".

A. R. S., otro miembro del equipo de Soto, explica: "Ha sido un partido muy limpio, a pesar de que hemos perdido. Es necesario estar cerca de la sociedad, y esta idea es un avance muy positivo antes de conseguir la verdadera libertad".

Ambos, internos aseguran que querían apuntarse a todas las disciplinas deportivas de la cárcel. Sin embargo, la demanda rebasa la oferta y cada modalidad tiene sus pruebas de selección.

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