Granados convoca mañana a la Junta de Fiscales para dar carpetazo al presunto chantaje al Rey

El fiscal general del Estado, Carlos Granados, convocó ayer a la Junta de Fiscales de Sala del Tribunal Supremo para mañana viernes, día 1 de diciembre, con el fin de analizar la presunta operación contra el Rey. Tras el examen de las diligencias practicadas, éstas se enviarán al juzgado de la Audiencia Nacional que corresponda. Por otra parte, Javier de la Rosa no mencionó en su declaración ante la Fiscalía, el pasado viernes, que los 12.000 millones transferidos a Manuel Prado eran para financiar un lobby político, tal y como alegó ante la Corte Comercial de Londres.

La secretaría técnica de la Fiscalía General del Estado envió la nueva documentación a los fiscales con la convocatoria de la junta para mañana, viernes. En ella se incluye la declaración de De la Rosa y la denuncia presentada por el empresario José María Ruiz-Mateos contra De la Rosa, Prado, el ex responsable del Cesid Emilio Alonso Manglano y el abogado Juan José Folchi, que correspondió, por reparto, al Juzgado Central de Instrucción número 3 de la Audiencia Nacional.Entre los documentos faltaba por entregar la denuncia presentada el pasado 16 de noviembre por el abogado Javier Sainz Moreno sobre las presuntas amenazas al Rey, y que fue tramitada por el juez Carlos Bueren, titular del juzgado número 1, con anterioridad a la de Ruiz-Mateos.

La Fiscalía tenía intención de archivar las diligencias informativas el pasado martes 21, fecha en que incluyó en el orden del día de la Junta de Fiscales, como punto segundo, el tratamiento de las diligencias practicadas. Con todo, tanto el fiscal general como el instructor, José Aparicio, decidieron dar el último paso antes de archivar: tomar declaración como inculpado a De la Rosa. El financiero negó haber urdido una operación con tra el Rey, algo que se le había atribuido a raíz de diversos comentarios privados y entrevistas grabadas por dos periodistas para un libro.

En su declaración ante la Fiscalía, De la Rosa explicó que los 12.000 millones de pesetas que se transfirieron en 1990 y 1992 a Manuel Prado fueron ordenados por el presidente de Kuwait Investment Office (KIO), que entonces era Fahad Al Sabah. Asimismo, sostiene que el dinero le fue solicitado por Prado y que "ni una peseta" de esa cantidad tuvo como destinatario al Rey, según consta en la declaración.

Pagos a Prado

Lo que De la Rosa no declara ahora es lo que sí alegó ante la Corte Comercial de Londres, que tramita una demanda civil contra él: que los 12.000 millones de pesetas transferidos a dos cuentas suizas de Prado fueron solicitados por este último, "quien pidió estos pagos para el lobby político que obtuvo de instituciones del máximo nivel en España apoyo para Kuwait durante la guerra de liberación de ese país". Curiosamente, el primero de estos pagos, de 80 millones de dólares, tuvo lugar el 10 de octubre de 1990 y la guerra estalló el 17 de enero de 1991.