Fusilar a los bandidos
El momento estelar de las apariciones públicas de VIadímir Zhirinovski sigue siendo el programa contra la delincuencia, que incluye la promesa de "fusilar in situ a los bandidos". En un principio, la medida parecía generalizada para cualquier delito y con sólo mencionarla, el político arrancaba calurosos aplausos. "Más adelante se utilizarán otros métodos, pero ahora hay demasiado criminal" declara últimamente Zhirinovski, que se ha moderado algo y ahora restringe a "sólo temporalmente" tan drástica acción, limitada también a casos extremos, como "el robo nocturno de depósitos de mercancias".En total, según dice, Rusia tiene tres millones de bandidos ("que van en Mercedes a 150 por hora") y 1,5 millones de policías (que, al circular en coches de fabricación nacional de poca potencia, no pueden dar alcance a los bandidos).
El político planea, además, enfrentar a las bandas delictivas para que se eliminen entre sí, y ofrecer a los vencedores la posibilidad de integrarse en la sociedad y legalizar sus negocios o emigrar al extranjero.
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