Vecinos de Lavapiés pelean para que sus casas no sean sustituidas por una alameda

El proyecto municipal de derribar las 300 viviendas de las calles de Zurita y de Buenavista para levantar una alameda en pleno corazón de Lavapiés ha provocado que los vecinos reaccionen rápida y coordinadamente. Además de las sábanas con frases alusivas al derribo que ya cuelgan en las ventanas y de la manifestación convocada para hoy, la asociación de vecinos La Corrala ha recogido, entre los 310 residentes afectados, 268 firmas contrarlas. El 89%. No quieren saber nada ni de indemnizaciones ni de realojamientos. "Aquí llevo toda la vida y de aquí no me van a mover; quiero que limpien el barrio, no que me lo cambien", comenta Manuela, una de las capitanas del batallón de contrarios al plan.El Ayuntamiento, por su parte, asegura que si un 75% de los vecinos se manifiesta en contra del proyecto, que se inscribe dentro del Plan General de Ordenación Urbana, la alameda no se llevará a cabo nunca.

Además de la alameda, que iría desde la calle de Santa Isabel hasta la plaza de Lavapiés, el plan del Ayuntamiento para este barrio prevé otras dos grandes obras. La manzana que forman las calles de la Esperanza, de la Escuadra y de la Primavera, según el plan, dejará paso, tras el derribo de unas 80 viviendas, a una plaza. Los vecinos de esta manzana tampoco quieren saber nada de ceder sus casas. Otro punto del plan prevé el derribo del teatro Olimpia, en la plaza de Lavapiés, para sustituirlo por otro.