La constructora Agromán pagó comisiones a Roldán para obtener obras de la Guardia Civil

Una nueva constructora se suma a la lista de las investigadas por pagos a Luis Roldán. La constructora Agromán, cuando era filial al 100% de Corporación Banesto, pagó comisiones a Luis Roldán, ex director general de la Guardia Civil en los años 1990 y 1992, por la adjudicación de varias obras del instituto armado. Entre ellas, destacan las comandancias de Oviedo, Mijas y Melilla, según una nota manuscrita del propio ex director general -hallada en una caja de seguridad en Suiza- que está en poder del juzgado número 16 de Madrid, que instruye el caso Roldán. Estos pagos son similares a los que involucran a constructoras con pagos de comisiones por adjudicaciones por valor de 27.863 millones de la Guardia Civil.

Luis Roldán apuró en beneficio propio el cargo que desempeñaba hasta el final. De hecho, firmó el último contrato con uno de los constructores hoy imputados en el caso que lleva su nombre sólo unas horas antes de pedir al Gobierno su relevo al frente del instituto armado, el 7 de diciembre de 1993, tal como se desprende de los pagos que constan en el sumario y que abarcan buena parte de los siete años en el cargo.Las obras adjudicadas por Roldán a Agromán se produjeron cuando esta constructora pertenecía a la Corporación Industrial de Banesto y estaba presidida por Luis Ducasse Gutiérrez, quien afirmó no tener "en absoluto noticia de estas investigaciones" judiciales, aunque sí confirmó la adjudicación de las casas cuartel de Melilla y Oviedo a la firma que él presidía.

Ésta es la primera vez que aparece en el - caso Roldán una implicación para la empresa Agromán, beneficiada por un monto de adjudicaciones de más de 7.000 millones de pesetas.

Roldán anotó en su contabilidad privada la cifra de 361 millones como comisiones de las obras de Mijas y Melilla. Esta segunda fue adjudicada en el verano de 1992 por 4.480 millones y luego ampliada en 800 millones más. La edificación comprende, además de la comandancia, viviendas y aparcamiento para 186 guardias civiles. Su arquitecto era Ángel Fernández Arroyo, esposo de Esther Fernández, la secretaria de Roldán. Las obras adjudicadas a Agromán fueron paralizadas con la huida de Roldán y han sido reactivadas hace un mes.

Agromán también obtuvo la comandancia de Oviedo, que fue inaugurada por José Luis Corcuera, ex titular de Interior, en 1992. En esta obra se produjo la irregularidad adicional de que se amplió el presupuesto inicial en unos 400 millones de obra que se realizó y que, sin embargo, no fue contratada en forma. En ambos casos, el director de las obras era el coronel. José García Mallo. El cuartel alberga a 162 guardias y sus familias y ocupa 32.000 metros cuadrados; su coste está presupuestado de unos 3.000 millones.

Las comisiones afectan a buena parte de las obras incritas en La Biblia, el librote de control interno sujeto a la intervención de la Guardia Civil.

Desde la época de las obras con Roldán, Agromán ha cambiado dos veces de manos, la primera como consecuencia de: la adjudicación de Banesto al Banco Santander y después, tras una OPA, a Ferrovial.

Fuentes próximas a la anterior presidencia de Ducasse, que fue instalado en el cargo por Mario Conde en 1987, señalan que los contactos con la Guardia Civil fueron muy intensos e incluyeron, además de los talones de las comisiones, facilidades para que el entorno de Roldán accediera a unos pisos de Agromán en la calle de Santa Engracia de Madrid.