El planeta Larson

El humorista gráfico que cultiva el chiste diario suele tener dos opciones: nutrirse de la realidad, preferentemente política, o crearse su propio mundo y confiar en que el lector se encuentre a gusto en él. Gary Larson, evidentemente, optó por la segunda posibilidad cuando se inventó, en 1990, The far side (La zona lejana). Llevando la paradoja y el absurdo hasta sus últimas consecuencias, Larson creó un universo entre delirante y doméstico en el que muchos norteamericanos se instalaron cada mañana, hasta que el autor decidió dar por terminada la serie este mismo año.En España, algunos de sus chistes fueron publicados en la revista El Víbora, pero no debieron gozar en exceso de la simpatía de sus lectores porque enseguida se interrumpió el flujo. En Estados Unidos, por el contrario, Larson es una estrella del humor gráfico cuya obra ha sido recogida en cinco excelentes antologías (The far side gallery, algunos de cuyos tomos han sido prologados por gente como Stephen King o Robin Williams) y ha dado origen a un amplio merchandising compuesto por camisetas, vasos, platos y demás adminículos inherentes a cualquier fenómeno de masas.

Y es que The far side, aunque nadie lo suponía al principio, acabó por convertirse en un éxito. De ahí que cuando el autor dijo que lo dejaba después de quince años porque no puede uno pasarse la vida haciendo lo mismo, miles de voces autorizadas (y no tanto) clamaron en contra de tan noble decisión. La gente, simplemente, se había acostumbrado a asomarse cada mañana desde las páginas de su periódico al extraño e hilarante mundo de Gary Larson. Un mundo de animales que se portan como personas adultas, personas adultas que se portan como niños, y niños que se portan como aspirantes a asesinos en serie.

El espacio que esta noche emite Canal +, dentro de Pieza Extra, promete fidelidad al espíritu de Gary Larson. Son 30 minutos en los que 12 de sus felices ocurrencias se convierten en dibujos animados.

Quienes no conozcan la obra de Larson tienen la oportunidad de descubrirla. A los adictos a la zona lejana les servirá como consuelo y recordatorio de una serie gloriosa.