La salvaje búsqueda de la 'supercogorza'

Todo el mundo parece estar de acuerdo en que el alcohol está en el origen del aumento de accidentes de coche. Además de esos siniestros, los comas etílicos, las peleas más o menos multitudinarias y toda clase de desórdenes nocturno han pasado a formar parte del fin de semana, y celebraciones escolares de los jóvenes españoles. Y, para que la cosa no decaiga, abundan cada vez más iniciativas para, incentivar el más desaforado consumo de alcohol ligándolo a la competitividad del "yo más". La Fiestorra preparada para esta noche en Valladolid es un prototipo de ello.Numerosas calles cercanas a la zona universitaria de la capital castellana están desde hace días empapeladas de carteles de más que dudoso gusto, en los que se convoca al I Certamen de Bebida. Bajo el título de Fiestorra, los organizadores han preparado un gran concurso para hoy a las ocho de la tarde, cuyo ganador será el "que más beba". El acontecimiento se celebrará en un bar cercano. a la Facultad de Industriales, situado junto a varios colegios públicos y un instituto.

La coalición Izquierda Unida (IU) en el Ayuntamiento de Valladolid, además de denunciar la situación, ha pedido la intervención municipal y la posibilidad de sancionar al bar La Piscina, perteneciente al poco conocido club, social La Glorieta y convocante de este I Certamen de Bebida. Un gran concurso de incitación al consumo juvenil de alcohol que tiene como premio 7.000 pesetas en metálico más el importe de las consumiciones. El segundo premio, más humilde, consta de dos botellas de whisky.

Óscar López, concejal de IU, aseguró ayer que su coalición "ha solicitado la intervención del organismo competente para el control de la citada fiesta, la retirada de los carteles de la vía pública, la sanción, si procede, a los convocantes del certamen y el estudio del club social La Glorieta para temar en su caso las medidas pertinentes".

Poco tiempo después de formalizar su denuncia ante los medios de comunicación, el alcalde de Valladolid, Javier León de la Riva, aseguró: "Tan pronto como hemos tenido conocimiento de tan deleznable fiesta, se ha avisado a la Policía Municipal y al departamento de Medio Ambiente para que este despropósito no se lleve a efecto". El alcalde también aseguró que, en caso de encontrar alguna irregularidad en el propio bar, "se procederá a sancionarle con la máxima rigurosidad que nos permita la ley". Desde el Ayuntamiento también se ha sefialado que se va a instruir expediente contra los organizadores de la Fiestorra "por colocación de propaganda ilegal y, si fuera el caso, por la incitación al consumo de bebidas alcohólicas".

Tanto IU como otros colectivos de Valladolid han manifestado "su preocupación por este tipo de situaciones en las que se incita a un sector principalmente joven a divertirse con un elemento como es el alcohol, así como la utilización de una imagen degradante de la mujer y de los menores como reclamo".

Este tipo de fiestas ha proliferado en los últimos meses en la capital de la comunidad castellano-leonesa, e incluso en las zonas cercanas a institutos facultades universitarias es muy común ver en las paredes de los edificios las listas de precios de algunos bares que ofrecen grandes descuentos a los estudiantes. Muchos de esos bares, según fuentes municipales, apenas se preocupan de saber si están vendiendo alcohol a menores de edad, y en un importante número de ocasiones han sido sancionados por el Ayuntamiento, bien con multas o con cierres cautelares.

Vecinos de zonas de pública concurrencia juvenil también han venido denunciando la actividad de diversos bares y chupiterías, locales que se encuentran a rebosar tras la salida de los estudiantes de los colegios y donde, por el módico precio de algo más de cien pesetas, pueden tomarse una copa. Los vecinos también han señalado que, para disimular los efectos de las melopeas, los estudiantes utilizan el viejo sistema del café. con sal, que les permite vomitar gran parte del alcohol que han ingerido, el cual muchas veces es de mala calidad.

En su denuncia, IU recuerda que existe una ordenanza municipal sobre prevención de alcoholismo y otras medidas de control sobre establecimientos hosteleros, aprobada en octubre de 1991, y que, entre otras cosas, prohíbe la venta de bebidas alcohólicas a menores de 16 años.