Quejas ante Génova 13
"No había letra pequeña". Colaboradores inmediatos de Alberto Ruiz Gallardón explican así la decepción de sectores profesionales influyentes, ajenos al PP. "Creían que las promesas de profesionalización de la Administración eran para la galería y que se haría lo mismo que se había criticado al PSOE, aplicar la letra pequeña y quitar a unos para poner a otros. Pero no había letra pequeña".
La decepción de algunos es un hecho cierto. Además del coro de articulistas de diarios que han visto frustrados sus planes respecto a Telemadrid, médicos y hasta gentes del teatro se han dirigido a Génova 13 para plantear sus quejas. Los primeros argumentan que la mayoría de los médicos son de derechas, mientras la consejera Rosa Posada confirma a algunos de los gestores que designó la izquierda. Los segundos se quejan de que "se sigue subvencionando a los de siempre".
La dirección nacional no ha movido un dedo ni ha hecho un gesto en dirección a Ruiz Gallardón. "Tiene autonomía de gestión, como los demás", asegura un miembro de la ejecutiva. La dirección sólo ha intervenido ante errores de bulto, como la designación en Valencia de un diputado para dirigir los servicios informativos de la televisión autonómica.
La inmovilidad de la dirección no significa que el aparato del partido esté encantado con la confirmación, por el momento, del equipo directivo de informativos de Telemadrid. "Es el mismo que nos machacaba antes. Pero es una decisión de la Comunidad de Madrid, no nuestra", afirman.
